Crisis y deudas

En opinión de José Román

Crisis y deudas

 

“El presupuesto debe equilibrarse, el tesoro debe ser reaprovisionado, la deuda pública debe ser disminuida, la arrogancia de los funcionarios públicos debe ser moderada y controlada, y la ayuda a otros países debe eliminarse, para que Roma no vaya a la bancarrota. La gente debe aprender nuevamente a trabajar, en lugar de vivir a costa del Estado.”

 

Año 55 A.C. CITA DE MARCO TULIO CICERÓN.

 

Esta frase tiene 2067 años y es tan actual como si ayer en una mañanera la hubieran propuesto para ajustar las deudas del gobierno, o bien como si hoy la hubieran propuesto en el senado o la Cámara de Diputados para ajustar a la realidad la economía nacional.

Algo tan sencillo y tan congruente no cabe en la mente de los políticos llevar a la realidad. En el caso de Morelos, tanto el gobierno estatal como el municipal insisten neciamente en pedir y exigir que la federación les proporcione más dinero para poder gastar a sus anchas en presupuesto en lo que regularmente hacen que son despilfarros y excesos de gastos sin justificación, incluso sin que muchos gastos les correspondan al rubro de su función.

No existe conciencia del ahorro, de la optimización del gasto público y se llenan las oficinas de muchos programas inútiles e inservibles. Cada día se llenan más de trabajadores y obligaciones que no son necesarias para el funcionamiento de la función pública. Cada día abogan por más dinero, y se lo exigen a los congresos estatales y federales. Piensan los gobierno estatal y municipales que son beneficencia pública, benefactores generadores de empleo y no se dan cuenta que son un sector improductivo que constituye un estorbo que solo sirve para gastar y que su función tiene cero valor agregado, es decir, son improductivos. El número de trabajadores no corresponde al número de necesidades y los único que hacen bien es burocratizar y hacer recaer la nómina y los parásitos que a través de la política alimentan a un sinnúmero de burócratas que medran o viven del presupuesto sin mayor utilidad a su sociedad o a sus familias.

Estamos generando una casta de privilegio voraces que cada día será más difícil poder sostener porque la economía no da para tanto y menos aun cuando el escaso sector productivo es exprimido para sostener esa perversa e inútil burocracia o para sostener una serie de apoyos a jóvenes en edad productiva que al final terminan comiéndose la gallina de los huevos de oro que es la quiebra o extinción del productor del campo y el empresario en las ciudades.

No miran la historia, no se percatan de la existencia de reglas elementales que generan un espejismo momentáneo en economía pero que al final terminan por derrumbarse arrasando con todo y arrasando cualquier economía. Ejemplos sobran y están a la vista pero se niegan a mirar. Ven los demagogos como enemigos y hacen de los empresarios los nuevos esclavos que sostienen a los inútiles en lugar de mirar a los empresarios como fuente de generación de empleo y de productividad que permite mantener el estado de cosas para los pobres y para los propios políticos que en uso de la fuerza del estado imponen una nueva esclavitud que termina fatalmente extinguiéndose porque fueron incapaces de armonizar los diversos factores de la producción en una sociedad que ha demostrado históricamente que no puede sobreexplotarse porque termina autodestruyéndose.

Gobernadores van y vienen y Presidentes desfilan como novatos cada tres años y todos cometen el mismo canibalismo: piden y piden y se olvidan de trabajar o de ajustar sus finanzas a su realidad. Se sirven y se auto sirven con la cuchara grande y parten y reparten cuanto pueden, dejando al que sigue con la bronca de andarse cruzando los dedos porque no puede hacer lo mismo y soñó con hacer los mismo cuando corrompió, prometió con todas sus fuerzas por conseguir un cargo que lo sacará de pobre y que  promete el futuro de una buena vida para él y los suyos si la sabe hacer. Se alimentan de nuestra ignorancia de nuestra pobreza y bajo la promesa de hacernos ricos y felices o mantenidos y atenidos a las ayudas públicas les seguimos dando poder, votando por ellos, por los más chulos, por los deportistas, por los que nos prometen el oro y el moro ignorando todos nosotros o auto engañándonos de que la riqueza para repartirse, necesita crearse y que cuando acabas con el generador del empleo y riqueza, acabas con los sueños de todos. Vean Venezuela, Vean Cuba, Vean el final de la URSS, véanse a sí mismo, a su conciencia…