Serpientes y escaleras - La siguiente legislatura

Concluyó el registro de candidatos; ya podemos imaginar cómo será el próximo Congreso.

La siguiente legislatura

El plazo que establece la ley para registrar a los candidatos a los diferentes cargos de elección popular concluyó y no todos los partidos pudieron llenar sus elencos; en los siguientes 15 días el órgano electoral morelense depurará los registros hasta llegar a la lista definitiva de mujeres y hombres que competirán en el proceso electoral del mes de junio. Con lo que tenemos a la vista es posible comenzar a hacer predicciones.

En la contienda de junio en Morelos vamos a elegir diputados locales, federales y presidentes municipales; hay 23 partidos que en suma registraron 8 mil 694 ciudadanos. Democráticamente todos los cargos en disputa son importantes, pero políticamente hay algunas posiciones que llaman más la atención.

Desde un ángulo de gobernabilidad lo que debemos observar es la conformación del siguiente congreso; las 20 posiciones que integran el parlamento morelense definirán el rumbo del estado, de los gobiernos municipales y el tramo final de la administración de Cuauhtémoc Blanco Bravo. Esa legislatura será particularmente importante porque se trata del parlamento que acompañará al gobernador hasta el último día de su mandato y el que eventualmente lo juzgaría en caso de que se formalizaran los juicios que varios sectores y actores amenazan con interponer en su contra.

Todas las legislaturas son importantes, pero las de la segunda mitad del sexenio tienen un valor especial: el primer congreso va de la mano del jefe del ejecutivo durante los primeros años, cuando está vigente el bono democrático y hay poco desgaste social; esos diputados empiezan con el régimen y terminan a la mitad. El segundo, en cambio, lo acompaña hasta el final, estará con él ejecutivo cuando ya hay un deterioro de la imagen pública y en el momento que empieza la efervescencia por la sucesión.

Las elecciones intermedias se consideran un termómetro social de los gobernantes, se dice que en ellas gana o pierde el mandatario porque son el refrendo de la confianza ciudadana en la forma como ha ejercido el poder durante los primeros tres años. Un dato vale la pena recordar en este sentido: en las elecciones intermedias baja la participación electoral y es común que pierda el partido en el poder; algunas veces más y otras menos, pero siempre los gobernantes retroceden políticamente en este punto.

La conformación de la segunda legislatura del sexenio es importante por varias razones, empezando por su influencia en la gobernabilidad; esos congresos se vuelven el contrapeso o el aliado del ejecutivo, el espacio desde donde se apuntalan las políticas de fin de sexenio o en donde detonan crisis que en varias ocasiones han llevado a los mandatarios al banquillo de los acusados.

Para ejemplificar lo anterior recordemos dos momentos: la segunda legislatura del gobierno de Jorge Carrillo Olea hizo eco de las demandas sociales y presionó tanto al gobernador que a la vuelta de varios meses generó las condiciones para su salida; la contraparte a esa actuación fue la segunda legislatura de Graco Ramírez, ahí los diputados se convirtieron en cómplices del mandatario, reformaron las leyes a su favor, hicieron cambios constitucionales para ayudarlo a mantener el poder y crearon un andamiaje político que le permite hasta ahora librar el brazo de la justicia.

Ganar el congreso siempre es una prioridad para los gobernadores, sobre todo cuando se trata de la segunda legislatura; obtener el control del parlamento se puede lograr de dos maneras: ganando la mayoría de las diputaciones o construyendo alianzas con los ganadores.

Con los nombres de los candidatos registrados es posible desde ahora proyectar lo que podría suceder en las elecciones. Veamos a los posibles ganadores:

En el distrito 1 Javier Bolaños de FUERZA POR MÉXICO

En el distrito 2 Marco Martínez Dorantes del ENCUENTRO SOCIAL

En el distrito 3 José Casas del PARTIDO DEL TRABAJO

En el distrito 4 Francisco Sánchez del PAN

En el distrito 5 Macrina Vallejo de MORENA

En el distrito 6 Ariadna Barrera de MORENA

En el distrito 7 Oskar Rosales de MOVIMIENTO CIUDADANO o Paola Cruz de MORENA

En el distrito 8 Beto Sánchez del PRI o Fernando Aguilar de MAS

En el distrito 9 Luz Dary Quevedo de MOVIMIENTO CIUDADANO o Julio Espín de PROGRESA

En el distrito 10 Pablo Molina del PAN o Israel Andrade de MOVIMIENTO CIUDADANO

En el distrito 11 Arturo Pérez de MORENA

En el distrito 12 Agustín Alonso de NUEVA ALIANZA

Si así quedaran las cosas el siguiente paso sería la definición de las 8 diputaciones plurinominales; dependiendo de la votación y de los triunfos directos habría que revisar la fórmula de designación para conocer qué partidos accederían a una diputación sin quedar sobrerrepresentados. Si Morena ganara 3 o 4 distritos de mayoría no tendría diputados plurinominales; lo mismo le podría suceder al PAN si llegasen a triunfar dos de sus candidatos.

Un dato más: a la hora de repartir los espacios plurinominales aplicará la paridad de género, por lo que quienes accederían a la cámara de diputados serían las primeras mujeres registradas en la lista, sin importar el lugar en que se encuentren ubicadas.

Por supuesto que lo anterior es una mera proyección personal, pero basada en lo que pronostican los propios actores políticos, tomando en cuenta el perfil de los candidatos, la imagen de los partidos y en algunos casos, como en Jiutepec y Jojutla, la inercia que provocarán los alcaldes que buscan la reelección.

Sí la legislatura 55 quedase conformada más o menos de esta manera, el escenario político para la segunda mitad del sexenio sería diametralmente distinto al que hemos visto hasta ahora, no solo porque en todos los integrantes del congreso estarán pensando en la sucesión, sino porque los futuros diputados tendrán mayor preparación que los actuales. En este plano habrá que observar a figuras como Javier Bolaños, José Casas y Agustín Alonso, amén de quienes lleguen a la legislatura por la vía plurinominal.

La conformación de la 55 legislatura de Morelos es importante por distintos aspectos; por la gobernabilidad, pasando por la relación entre poderes y la sucesión.

Ésta es una proyección de partidos y de nombres; a partir de ello cualquiera puede imaginar la agenda política que prevalecerá en el congreso los siguientes tres años.

• posdata

Hablando de diputados: el legislador de Morena Javier García Chávez dijo ayer que derivado de la falta de acuerdos entre sus homólogas lo procedente es que el diputado José Luis Galindo, continúe al frente de la Mesa Directiva del congreso local “porque ya no da tiempo de hacer cambios”.

Recordemos que las damas integrantes del parlamento local exigieron que en tramo final de la legislatura fuera una mujer quien estuviera al frente de ese órgano de control, pero la idea no ha prosperado; la respuesta de sus homólogos a tal petición fue afirmativa desde el principio y el propio vicepresidente confirmó que asumiría las funciones de presidente solo hasta que sus compañeras acordaran al sustituto de Alfonso Sotelo.

Varias semanas después de eso la presidencia sigue acéfala porque las legisladoras no han podido consensar a una misma persona; al menos un par de diputadas han dicho que tienen interés en ocupar la posición, pero nada se ha acordado.

La expresión del diputado Chávez es dura, pero no falsa: la falta de acuerdos entre diputadas es evidente y eso se complicará conforme avance la elección. Estar al frente de la Mesa Directiva no es un asunto sencillo desde ningún ángulo, porque junto a la fuerza de la presidencia está la enorme responsabilidad de manejar las finanzas y cerrar administrativamente la legislatura.

Digámoslo de esta forma: todos quieren manejar la chequera del congreso, pero nadie se anima a tomar la responsabilidad que eso implica, sobre todo porque quienes integren la próxima legislatura estarán muy interesados en fiscalizar lo hecho durante estos tres años.

• nota

Los candidatos son el rostro de los partidos en la elección, pero para que las cosas funcionen junto a ellos debe existir un grupo de gente que diseñe y haga funcionar las estrategias. En Cuernavaca los equipos se van definiendo poco a poco:

Jorge Argüelles tiene a su lado a Vladimir Ramos, un estratega político de amplia trayectoria y experiencia en la vida pública; Vladimir es un estudioso de la política, trabaja ordenadamente y gracias a eso ha logrado ir allanando el camino de su candidato.

José Luis Urióstegui está acompañado de los hermanos Daniel y Adrián Martínez Terrazas y algunos otros personajes que lo siguen desde hace varios años en su trayectoria profesional y política; la juventud de los Terrazas no es sinónimo de inexperiencia y el ejemplo de ello es que lograron armar una fórmula electoral justo como quisieron.

Sergio Estrada Cajigal reclutó a sus viejos amigos, a quienes lo acompañaron en la campaña de 1997 y algunos que estuvieron a su lado en el gobierno estatal; el piloto se recarga en Alfonso Pedroza, un hombre de más de 80 años que ha estado alejado de la vida pública por más de una década. Estrada peca de confiado y actúa con soberbia.

Antonio Villalobos está asesorado política y electoralmente por su hermano Pablo; juntos han diseñado una campaña de reelección desde uno de los partidos afines a la 4T luego de que Morena les cerró la puerta; el alcalde supone que la alcaldía capitalina es suficiente para una campaña electoral, pero se equivoca: necesita una estrategia y una campaña específica para su candidatura.

Matías Nazario es hombre orquesta, tiene a un grupo de personas que lo ha acompañado desde hace varios años, pero él mismo es quien piensa, diseña y opera su estrategia; Matías supone que la estructura que tiene le dará para ganar la elección, pero igual que los demás necesita hacerse notar como un contendiente serio.

De los demás candidatos es ocioso hablar; ninguno tiene posibilidad de ganar y en algunos casos no meterán siquiera un regidor.

• post it

Todas las autoridades de salud del país advierten que luego de las vacaciones de semana santa o vacaciones de primavera en otros países (spring break) vendrá una tercera ola de covid, quizá más fuerte que la de diciembre.

Hagamos cuentas: si eso sucede, en México volveremos a un escenario crítico a finales del mes de abril y durante mayo, es decir, en plenas campañas.

¿Ya tomaron en cuenta eso los partidos y sus candidatos?

• redes sociales

¿Cuántos votos suponen los candidatos que ganarán a través de sus cuentas personales de redes sociales?

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