La vida en rosa

En opinión de Lorena Elizabeth Castillo

La vida en rosa

Desde hace 34 años, en 1991, que se utilizó el primer listón o lazo rosa en octubre de 1991, cuando la Fundación Susan G. Komen los obsequió a los participantes de una carrera en Nueva York, en alusión a los sobrevivientes del cáncer de mama, sin duda que se ha avanzado en la prevención de la enfermedad.

Entre las metas alcanzadas se puede considerar que la campaña ha contribuido al incremento de la detección temprana, ya que más mujeres se hacen pruebas oportunas; junto con el tratamiento a tiempo han mejorado las tasas de supervivencia de las pacientes y el Mes Rosa ha generado conciencia sobre la importancia de la autoexploración y la detección precoz del cáncer de mama.

La incidencia de la alteración celular en México es un tema importante de salud pública, según los datos disponibles, se registran aproximadamente 23 mil 790 nuevos casos en personas de 20 años o más cada año, lo que representa una tasa de 27.64 casos por cada cien mil habitantes.

Mientras que la mortalidad es de 7 mil 888 fallecimientos anuales, con el 99.4 por ciento ocurriendo en mujeres y la detección temprana es de apenas el 64.9 por ciento del total; por lo que en ésta última cifra es en la que debemos concentrarnos todas aquellas instituciones, servidoras y servidores públicos involucrados en la atención de las mujeres.

No está de más confirmar que el Instituto de la Mujer de Cuernavaca, se rige por la política pública implementada por la administración municipal capitalina de transversalidad, en materia de priorizar a las mujeres; es decir, organismos y dependencias, incluido el Cabildo ejercen su trabajo con perspectiva de género y respeto a las diversidades y respeto a los derechos humanos de mujeres y hombres.

La actualización y capacitación a servidoras y servidores públicos del Ayuntamiento ha servido también como detonante, para fortalecer las campañas de reeducación y sustitución de estereotipos machistas y de maltrato a las mujeres en escuelas, ayudantías y colonias; por lo que la prevención del cáncer es parte integral de esa política pública.   

Durante este mes se invita a portar un listón o moño rosa, símbolo internacional usado por personas, organizaciones y gobiernos que se comprometen a crear conciencia sobre el cáncer de mama y mostrar apoyo moral a las mujeres con esta enfermedad.

Pero más allá de octubre rosa, el llamado es para asumir ese compromiso todos los días del año, de manera que se incremente la cifra de detecciones y tratamientos oportunos que salven la vida de un número creciente de mujeres. Para que todas ellas exclamen, parafraseando la popular canción de Edith Piaf: La vida para mi / es color de rosa / y me siento tan feliz / que cualquier día gris / es color de rosa.