La inclusión laboral en Cam 24 Morelos
En opinión de Consepción Rodea Rosas
Mucho se habla y se escribe sobre inclusión, sin embargo, poco o muy poco se hace, pareciera más una tendencia que una cultura y ello limita las oportunidades de que un día sea nuestra forma de vida. Hacer inclusión es no sólo buscar oportunidades que permitan a las personas con discapacidad desenvolverse y participar de manera justa y equitativa en la sociedad, también hay que crearlas.
Si bien hay trabajo, aún hay mucho por hacer. En nuestro estado, en Educación Especial (EE) los esfuerzos se han enfocado a la inclusión educativa; dejando poco atendida la inclusión laboral.
La última etapa educativa en los Centros de Atención Múltiple es la capacitación laboral, que tiene como propósito proporcionar a los estudiantes experiencias que les permitan desarrollar competencias necesarias para el trabajo. En Morelos las experiencias de aprendizaje de este nivel se trabajan en un entorno protegido (aula o taller), que aun estando en las mejores condiciones de equipamiento, no representan un escenario real; limitando el desarrollo de los alumnos, existen pocas experiencias en escenarios reales.
El CAM 24 de EE Morelos, con la intención de proporcionar mejor respuesta educativa en este nivel, trabaja un proyecto de inclusión laboral integral que favorece en los estudiantes el desarrollo de habilidades para la vida y el trabajo dentro y fuera del aula; parte del proyecto consiste en gestionar y crear oportunidades reales de inclusión laboral en el autoempleo y empleo formal, que permita a los jóvenes vivir la experiencia de ser productivos y recibir una remuneración económica, con acompañamiento y capacitación permanente durante el proceso de inclusión. Los resultados de este proyecto son los siguientes: cuatro microempresas familiares de dulces artesanales funcionando aun en tiempo de pandemia, cuatro alumnos trabajando en la cafetería Resiliente. Actualmente, estamos viviendo otra experiencia de Inclusión Laboral en la Banquetera D´lizo, aquí tres jóvenes trabajan en el servicio de comida, poniendo en práctica sus habilidades y adquiriendo otras; siempre con el acompañamiento de la coordinadora del proyecto de inclusión.
Los resultados del CAM 24 son un esfuerzo compartido entre familias, estudiantes, docentes y empresarios locales que se sensibilizaron ante nuestro proyecto.
Si bien salirnos del aula ha significado tomar un riesgo, los resultados nos llevan a continuar con nuestros proyectos que dan cuenta de inclusión laboral real. “La inclusión laboral sería posible si no fuésemos unos cuantos, la inclusión la hacemos y la merecemos todos”.