La inclusión educativa una respuesta educativa integral a los alumnos con síndrome de Down.
En opinión de Juanita Zenón Arroyo
Juanita Zenón Arroyo 
El 19 de diciembre de 2011 en asamblea general de la Organización de las Naciones Unidas se decide designar al 21 de marzo como el Día Mundial del Síndrome Down. Este síndrome lo provoca una alteración cromosómica especifica del par 21, en donde se da una trisomía lo que da como resultado que el ser humano tenga 47 cromosomas en lugar de 46, esta alteración provocará a su vez una serie de rasgos físicos propios de las personas con síndrome Down, aunado a una discapacidad intelectual que puede ir de leve o moderada a una discapacidad intelectual severa.
En vísperas de esta conmemoración en el Estado de Morelos la Educación Especial y los Profesionistas en este ámbito reiteramos el compromiso de fortalecer el derecho a la inclusión en los diferentes ámbitos, familiar, educativo, social y laboral de las personas con síndrome Down o con alguna discapacidad.
En nuestro Estado de Morelos la atención Educativa de los niños con síndrome Down, se ha proporcionado tanto en los centros de atención múltiple como en las escuelas de educación regular, apoyadas por las Unidades de Servicio de Apoyo a la Educación Regular y los Servicios de Orientación como es el CRIE, en los niveles educativos que van desde la educación inicial, preescolar primaria y secundaria. Con el reto de proporcionar estímulos y estrategias adecuadas a cada alumno para lograr su desarrollo en las diferentes áreas tanto cognitiva como social, incrementando su participación en todas las áreas y empleando una práctica docente de igualdad con equidad para favorecer las necesidades educativas de cada alumno.
Cabe mencionar que las personas con síndrome Down nos han dado muestra de su gran capacidad para lograr destacar en diversos ámbitos como el deporte, la música, la danza el diseño, etc.
El aprendizaje es consecuencia de la influencia recíproca entre el individuo y medio ambiente (Amor Pan 2004). Por esta razón es conveniente señalar la importancia que juega el contexto y los apoyos tanto profesionales como materiales que este pueda brindar para que la participación y el funcionamiento de las personas con síndrome Down puedan ser exitosos.
Los alumnos con Síndrome de Down son competentes para aprender, la escuela es un lugar donde aprenderán mucho más que conceptos, como por ejemplo a convivir, socializar, incrementar el desarrollo de su lenguaje oral, etc.
Aprenden lo que se les enseña en forma adecuada considerando su forma de ser y de aprender, la variabilidad de capacidades es amplia y diferente pero todos y todas pueden aprender, lo importante es que podamos determinar en una Propuesta Curricular Adaptada que ``si puede y debe aprender`` y luego tanto docentes como padres de familia y sociedad en general coadyuvar al logro paso a paso de los propósitos y objetivos planteados que les permitan elevar su participación y calidad de vida en todos los ámbitos donde se desenvuelve.
