El Tercer Ojo - La Memoria Remota y la Memoria Inmediata. O el combate a la Amnesia Retrógrada y Anterógrada.

En opinión de J. Enrique Alvarez Alcántara

El Tercer Ojo - La Memoria Remota y la Memoria Inmediata. O el combate a la Amnesia Retrógrada y Anterógrada.

"Nosotros somos el pueblo de la luz, ellos son el pueblo de las tinieblas (...) Haremos realidad la profecía de Isaías, ya no habrá robos en tus fronteras y tus puertas serán de gloria".

 

Benjamín Netanyahu

 

La memoria, como bien se sabe, es una herramienta psicológica que nos permite grabar, retener y recuperar información significativa –independientemente del grado de consciencia que tengamos de ello–, lo cual posibilita la organización de la información de modo que nos sea posible diferenciar en la vida cotidiana lo conocido de lo novedoso; asimismo, y ello no es irrelevante, se asocia indisolublemente con los procesos de aprendizaje y la atención.

 

La tríada enunciada –atención, memoria y aprendizaje–, sin duda, es, en su conjunto, un sistema que propicia las condiciones favorables para la. orientación selectiva de la actividad en la realidad que nos corresponde vivir.

 

La memoria, por otra parte, suele ponernos algunos obstáculos mediante la presencia del olvido de alguna o varias partes de los recuerdos pretéritos o, más aún, impidiendo "grabar" los sucesos o eventos recientes de modo que pareciera que no sucedieron los hechos más cercanos al presente existencial.

 

A este fenómeno del "olvido" o incapacidad para "grabar" y "retener" lo vivenciado recién se le denomina amnesia. Ésta puede ser involuntaria o inconsciente, pero también puede suceder que sea deliberada la omisión en aras de "defender" o "justificar" lo indefendible o injustificable.

 

Ahora bien, por otro lado, estos fenómenos de la atención, la memoria, el aprendizaje, la orientación selectiva de la actividad y el olvido o las amnesias no sólo son fenómenos de carácter personal o individual; de la misma manera pueden ser colectivos o comunitarios, es decir, psicosociales.

 

¿Qué mecanismos podrían ser diseñados para enfrentar el "olvido" o las amnesias?

 

La psicología y la psiquiatría nos han mostrado fehacientemente que la "fabulación" o la deformación de lo real para "explicar" lo que sucede suele conducirnos al engaño. Los delirios –tan escasamente comprendidos y explicados como trastornos del pensamiento– pudieran aparecer como estructuras patológicas entre algunas personas.

 

Empero ¿A qué viene está narrativa en los primeros párrafos de esta colaboración? podrán preguntar algunos de los lectores.

 

Pues bien –hubiera escrito el bardo Manuel Acuña al inicio de su Nocturno a Rosario–, se relaciona con las narrativas que propalan los dirigentes sionistas que presiden al Estado y Gobierno Sionista de Israel, no al pueblo judío ni a las comunidades judías, cargadas de un odio irrefrenable a los "árabes", a los palestinos, a los musulmanes, a las organizaciones y movimientos de resistencia palestinos –porque Palestina no posee ejército alguno que enfrente en una "guerra" al ejército sionistas de Israel, razón por la cual no podemos hablar de una "Guerra entre Palestina e Israel"-- y a todos aquéllos que difieran con sus estrategias criminales de exterminio a una población inerme y desarmada, con sus asesinatos selectivos de periodistas, médicos, jóvenes, mujeres, niños y ancianos o familias enteras vinculadas con quienes consideran sus "enemigos" y, faltaba más, con la difusión de los delirios y fabulaciones con las cuales pretenden distorsionar y deformar la realidad y la verdad.

 

Para deformar todavía más la verdad o lo real, acusan de "terroristas" a quienes masacran, asesinan y persiguen y tildan de "antisemites" a quienes difieren de su "estrategia" neonazi y criminal.

 

Fabulan y mienten tan descaradamente que pareciera que creen sus propias mentiras, o fabulaciones, como se muestra con el epígrafe que encabeza está colaboración y como si, además, careciéramos de memoria remota y reciente y como si no aprendiéramos. ¡Vamos! Cómo adoleciéramos de amnesia anterógrada o retrógrada.

 

Es necesario resaltar el hecho de que la memoria remota y reciente nos proveen de la información necesaria y valiosa para mantener la verdad a flote.