El Tercer Ojo - Día Mundial de la Prevención del Maltrato a las Personas Mayores

En opinión de J. Enrique Alvarez Alcántara

El Tercer Ojo - Día Mundial de la Prevención del Maltrato a las Personas Mayores

El próximo 15 de junio se celebrará el Día Mundial de la Concienciación para la Prevención del Maltrato a las Personas Mayores. Hace un par de años, en plena era pandémica del COVID-19, y dentro del marco de la conmemoración del dicho Día , la Organización Mundial de la Salud (OMS) —en colaboración con el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas (DAES), la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), ONU MUJERES y con el apoyo de la Red Internacional para la Prevención del Maltrato a las Personas Mayores— presentó el documento Combatir el maltrato de las personas mayores: cinco prioridades para la Década de las Naciones Unidas del envejecimiento saludable (2021–2030).

 

Según se informa en un boletín de la OMS (https://www.un.org/es/observances/elder-abuse-awareness-day): "El documento esbozaba las prioridades clave para prevenir y responder al maltrato de las personas mayores y, de este modo, contribuir a mejorar su salud, bienestar y dignidad. (...y se informa adicionalmente que…) este año, la conmemoración del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez proporciona información actualizada sobre la aplicación de estas prioridades".

 

Hoy, sin duda alguna, somos sabedores de que el ascenso de los años de vida en la población, aunado a las condiciones socioeconómicas de nuestras naciones latinoamericanas, ha generado las condiciones para que la distribución población se haya modificado de modo tal que la cantidad de personas mayores de sesenta y cinco años haya incrementado significativamente; empero no sólo ello, asimismo es inocultable el hecho de que adherido a este aumento de la cantidad de población de personas mayores se observa nitidamente un incremento de varias enfermedades crónicas o degenerativas que se manifiestan con altas tasas de morbilidad, atención médica y hospitalaria, costos de naturaleza económica, secuelas de diversa índole que provocan dependencia física, económica o psicológica de las personas mayores con respecto a quienes asumen el rol de "cuidadores primarios" –generalmente una persona del genero femenino, sea la madre, esposa, hermana, hija, qué sé yo, e infrecuentemente un varón–, problemas de salud mental –entre estos la ansiedad, angustia, depresión–, secuelas neuropsicológicas, discapacidades variadas y, aunque no lo creamos o lo admitamos, abuso, maltrato y violencia de.parte de sus cuidadores, entorno que, no lo dudo, forma parte la denominada "violencia vicaria".

 

No he considerado aquí la población que, además de todo lo que he descrito, sobrevive a las condiciones de pobreza, en sentido amplio. Mucho menos que, aunque loable como política pública, la imposibilidad de solventar estas circunstancias con las "becas" y estímulos que el gobierno otorga a las personas mayores.

 

Diversos y variados asuntos ocupan el interés y la atención de los gobiernos, partidos políticos, servidores públicos, medios de información, "redes sociales", instituciones de educación superior o de salud. Pese a ello, en esta hora es inocultable la importancia de aproximarnos hacia la comprensión, explicación y, sobre todo, el ofrecimiento de alternativas que aseguren una muy buena calidad de vida de este sector social y, desde luego, la prevención del maltrato, abuso y ejercicio de la violencia hacia las personas mayores.

 

Bajo la luz de estos argumentos, nuestro canal de YouTube de La Comuna de la Palabra tendrá una charla con los doctores Lilia Mendoza y Bulfrano Pérez Elizalde a este respecto, el próximo miércoles 14 de junio a las doce horas y será transmitido en vivo por las páginas de Facebook de La Comuna de la Palabra y Neuropsicología del Desarrollo, además de la de Enrique Alvarez.

 

Esperamos que diferentes medios informativos asuman la responsabilidad de abordar esta cuestión irrecusablemente de importancia y trascendencia.