Breves de Abogados y Políticos - El diablo anda suelto

En opinión de Alejandro Corona Markina

Breves de Abogados y Políticos - El diablo anda suelto

Hace una semana, liberaron a Luis Alberto Ibarra Ramírez, apodado “El Diablo”. Salió por la puerta principal del juzgado, con la sonrisa de oreja a oreja sin que nadie pudiera impedirlo.

El mencionado se grabó en video para acusar tortura por parte de la Fiscalía General del Estado y señalar el vínculo del titular de ésta, Uriel Carmona Gándara, con un tal “Erick Criminal”, a quien describe como una persona de 1.70 metros, “lomudita”, que usa Brackets y gorra, muy “pasado de lanza”, pues -dice- no lo puedes ni mirarlo porque ya te está echando bala.

Y en seguida vino la guerra de acusaciones entre el Fiscal General, Uriel Carmona Gándara y el titular del Poder Judicial Luis Jorge Gamboa Olea. El primero señala furioso a la juez que conoció el caso y el segundo defiende a la juzgadora y acusa la falta de datos de prueba para sostener la acusación, lo que inevitablemente condujo a la liberación del “Diablo”.

Así, Uriel Carmona inició una denuncia contra la juez en la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, que preside su subordinado, Juan Salazar Núñez, el mismo que ha expresado su intención de ser magistrado del Tribunal Superior de Justicia, quien podría ser afectado en su aspiración de manera colateral, ya que se encuentra entre el fuego cruzado de su actual patrón y el que eventualmente sería su presidente en el Tribunal Superior de Justicia.

Con la denuncia no nada pasará nada, pues el Poder Judicial, donde inevitablemente llegará el asunto, la instrucción es que no se toque a la juzgadora. Además, ninguno de los homólogos de ésta, será capaz de darse un balazo en el pie, condenando a una de sus pares, siendo que con las vueltas que podrían dar las cosas, al poco rato el carnicero de hoy será la res de mañana.

El haber iniciado una denuncia en su propia Fiscalía, más bien parece una salida de botepronto, con la que Uriel Carmona trató de enfrentar y distraer las cosas en los medios de comunicación, especialmente los nacionales.

No hay que olvidar los escándalos que han marcado a la actual Fiscalía General del Estado de Morelos, empezando con los hechos ocurridos el 5 de agosto de 2021, cuando los escoltas de Uriel Carmona paralizaron el tráfico en la autopista México-Acapulco, a la altura de “El Polvorín”, para atacar a unos jóvenes, quienes ebrios venían de nadar de Tehuixtla y se les ocurrió tratar de meterse en la numerosa caravana de autos blindados que custodia al fiscal. Los muchachos fueron desnudados y golpeados, pero nada pasó.

Luego se dio el lamentable caso de la joven Ariadna Fernanda, cuyo cuerpo fue encontrado por un ciclista el 31 de octubre de 2022, a un costado de la autopista rumbo a Tepoztlán. Presuroso, el fiscal salió a los medios a decir que la mujer había muerto por una intoxicación etílica. Fue la decidida intervención de la Fiscalía General de la Ciudad de México, lo que evitó que el caso se echara al costal de la impunidad, como muchos tantos.

Ahora, se da la batalla entre dos pesos pesados como lo son Uriel Carmona Gándara y Luis Jorge Gamboa Olea. En tanto, el asunto del terrible asesinato de los tres jóvenes, ocurrido en Huitzilac, permanece impune.