Observador político - Morelos y su inseguridad

En opinión de Gerardo Suárez Dorantes

Observador político - Morelos y su inseguridad

Nadie en su sano juicio puede decir que el tema de los baches es mayor prioridad para la ciudadanía que la seguridad, que tanto lacera a la población no de ahora, sino desde hace ya varios sexenios. En Cuernavaca y en Morelos, por décadas hemos estado tapizados de baches sin embargo la gravísima situación de inseguridad es lo que más le preocupa a la ciudadanía que vive con el Jesús en la boca, prácticamente todos los días.

ESTAMOS EN EL LUGAR 10 DE FEMINICIDIOS.- En esta oportunidad queremos plantear la situación que se brinda desde el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública Federal con datos de julio de este año, respecto de la incidencia delictiva, donde muestra información relevante. del fuero federal, fuero común, víctimas y unidades robadas en el país.

Lo cierto, es que Morelos dejó de estar en el primer lugar para ocupar actualmente la posición número diez, de los estados del país con el mayor número de feminicidios. Quien ocupa el nada honroso primer lugar en estos delitos es el Estado de México. Es importante mencionar que estos delitos son los que más laceran a la ciudadanía puesto que no hay avances de quienes cometen los crímenes porque impera la impunidad a su máxima capacidad. Por si fuera poco, la entidad tlahuica, tiene seis municipios que se ubican en los primeros cien con incidencia delictiva en el país como son: Amacuzac, Cuautla, Temixco, Tlaquiltenango, Atlatlahucan y Emiliano Zapata, que están en los lugares 36, 37, 39, 77, y 78 respectivamente.

En la misma situación se encuentra la tierra de mi general Emiliano Zapata, pero ahora en el tema de los secuestros, ya que la entidad está ubicada en el noveno lugar. Sin importar que Morelos sea uno de los estados más pequeños de la república mexicana. Asimismo, en cuanto a casos de violencia contra la mujer la entidad morelense está instalado en el casillero número 12 de las 32 entidades del país; el 24 en abuso sexual; 30 en hostigamiento y 24 en violación. Y el 24 en violencia contra la mujer, por el que el tema no es nada sencillo para los encargados de prevenir y procurar justicia que ven como sus estrategias y acciones para reducir la incidencia delictiva simplemente no funcionan en casi tres años de la actual administración estatal.

Lo preocupante es que no se ve cómo poder combatir algo que está a la par de los crímenes que se cometen como lo es la impunidad, en razón de que hoy, da miedo andar en calles y colonias de Cuernavaca al saber que quien sea puede perder la vida sin importar si es día, tarde o noche, derivado del cinismo en que cada vez más se están registrando estos delitos con la omisión e ineptitud de las corporaciones policías que cada vez, siguen siendo superadas en prácticamente todo por la delincuencia organizada.

LAS OCURRENCIAS DE JAZMÍN SOLANO EN TEMIXCO.- Una vez que terminó el proceso y pese a sus impugnaciones, la alcaldesa aún de Temixco, Jazmín Solano, ha dado muestras en los últimos días de lo que fue su administración: un gobierno de ocurrencias.

Solo recordar que al principio de su administración, Jazmín Solano López anunció que como parte de la 4T, su gobierno se orientaría sobre las directrices trazadas por esta política de gobierno. Es decir, los ejes principales trazados por el presidente se basaron en la austeridad, el uso racional de los recursos públicos orientado a satisfacer el rezago de infraestructura, sobre todo en las comunidades más marginadas y a fortalecer los programas sociales insignia: Pensión a adultos mayores, beca Benito Juárez, apoyo a madres solteras, tandas del bienestar y los programas orientados al campo, producción para el bienestar y sembrando vida.

Empero, desde el anuncio del Plan de Desarrollo Municipal, Jazmín comenzó a tomar distancia de la 4T. Y anunció con bombo y platillo como su obra del trienio, la construcción de un nuevo edificio municipal. Siguiendo el patrón de los gobiernos priistas que elegían obras “faraónicas” para “trascender” en la historia propuso construir un nuevo edificio en la Plaza Solidaridad de Temixco, espacio público del Centro del municipio donde las familias, los niños y los jóvenes cuentan con un lugar de esparcimiento. Además, dicha plaza había recibido en la última década más de diez millones de pesos de inversión en infraestructura. El rechazo de la población no se hizo esperar y tuvo que reconsiderar y su gran ocurrencia fue, demoler el actual edificio municipal para construir el nuevo, que en sus propias palabras tendría un costo de 50 millones de pesos (el equivalente a toda la obra pública de Temixco durante un año). Cabe señalar que el viejo edificio municipal se reconstruyó en la administración de la Presidenta Juanita Ocampo como parte de las acciones de reconstrucción derivadas del sismo de 2017. A mediados de 2019, Jazmín Solano derrumbó la parte trasera del edificio municipal y hasta la fecha, no se ha construido nada.

 

Ante la inviabilidad de sus ideas, comenzó en 2020 a realizar obras “fachada”, con la idea de minimizar la ausencia del edificio municipal. Realizó modificaciones cosméticas al puente peatonal de la entrada del municipio, lugar conocido como Puente del Pollo, pagando millonariamente un mural y anulando, en el colmo de la estulticia, la rampa de acceso a minusválidos al puente, dejando unas escaleras de caracol. Posteriormente inició la mal llamada rehabilitación del muro del 84. Dicho muro se construyó y rehabilitó con recursos etiquetados por Gisela Mota (que en paz descanse) cuando fue diputada federal. La intervención solo abarco de nuevo, cuestiones cosméticas como la colocación de plantas y un escudo de Quetzalcóatl. Posteriormente siguió con la construcción de fachadas en las entradas a los panteones del municipio, aunque su interior y su infraestructura se mantuvo con las carencias y limitaciones de siempre. Finalmente, se le ocurrió construir tres cruces de estructura hueca en el cerro de Acatlipa, en una especie de plazoleta, obra que contrasta con el entorno del lugar, rodeado de calles sin pavimentar, en pendientes sin escaleras ni andadores. El sitio se anunció como un espacio “turístico” en el que la principal atracción es precisamente la vista de la miseria alrededor del lugar. La obra fue reportada con un costo cercano a los 11 millones de pesos y en su inauguración el uso indebido de pirotecnia en el lugar y la total falta de coordinación de la protección civil municipal, ocasionó un accidente que dejó nueve heridos con quemaduras de primer y segundo grado.

Tales ocurrencias le ganaron el mote de “Lady Fachadas”. Así Jazmín Solano pretendió reelegirse para un segundo periodo, lo que recibió el rechazo de la ciudadanía en la elección del 6 de junio pasado.

¡Ah, y vienen las autorías!

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