El Texcal: ¿Reserva Ecológica o Parque de Diversiones para Especuladores?

En opinión de Tania Jasso Blancas

El Texcal: ¿Reserva Ecológica o Parque de Diversiones para Especuladores?

Quiero hablarles de un lugar mágico llamado El Texcal, que se encuentra en el hermoso estado de Morelos. ¡Un lugar tan especial que las autoridades han decidido convertirlo en un verdadero campo de juego para especuladores de bienes raíces! ¡Bravo, autoridades, por transformar una reserva ecológica en una mina de oro!

¿Se han preguntado alguna vez qué significa la palabra "reserva"? Bueno, parece que algunas personas en el poder no lo han hecho. Según el Convenio 169 de la OIT y el artículo 4 de la Constitución Mexicana, se supone que debemos proteger y respetar los derechos de los pueblos indígenas, así como la integridad de sus tierras y territorios. Pero, ¿quién necesita el respeto a los derechos cuando puedes hacer dinero, verdad?

La comunidad de Santa Catarina ha luchado durante décadas para preservar este patrimonio natural y cultural. Pero, ¡qué molestia son esas tradiciones de preservación cuando hay dinero en juego! Aparentemente, la idea de proteger extensas zonas boscosas y reservas acuíferas es simplemente aburrida para algunos.

Hablemos de cambios profundos, como la reforma de 1992 al artículo 27 de la Constitución. Cambiaron la propiedad ejidal y comunal a propiedad privada. ¿Para qué preguntar a los comuneros o ejidatarios qué piensan? Claramente, es más fácil ignorarlos y seguir adelante con el negocio.

El Texcal sufre una verdadera devastación ecológica, pero, ¿a quién le importa? No importa que este lugar sea vital para la captación de agua de lluvia, ¡sigamos destruyéndolo en nombre del progreso!

Queridas autoridades estatales y federales, ¿han leído el Convenio 169 de la OIT? Dice algo sobre proteger los derechos de los pueblos indígenas y respetar su relación con la tierra. Pero, claro, eso es solo un papel, ¿verdad?

Así que, mientras El Texcal se desmorona, aplaudimos a las autoridades por su brillante manejo de esta situación. Porque, al final del día, ¿quién necesita agua limpia y aire fresco cuando puedes tener bienes raíces de lujo? ¡Enhorabuena, México, por elegir el dinero sobre la conservación!

Quisiera pensar que es más fácil reír para no llorar cuando se trata de la triste realidad, de la falta de respeto por la tierra y los derechos de los pueblos indígenas.