Observador político - MORENA VS MORENA
En opinión de Gerardo Suárez Dorantes
El secretario general en funciones de presidente de Morena en Morelos, Gerardo Albarrán Cruz, inició desde los primeros días de este mes, cruzada en Cuernavaca y Temixco para echar abajo la coalición “Juntos Haremos Historia”, que avalaron las dirigencias nacional y estatal de este instituto, Encuentro Social y Nueva Alianza. Hoy, la postura es firme de ir solos sin importarles enfrentarse directamente con su líder nacional, Mario Delgado, a quien cuestionan y acusan de prácticas autoritarias y de imposición.
ACTVISMO POLÍTICO EN TEMIXCO.- El pasado dos de febrero, sin atender las medidas ni protocolos de sanidad al quitarse el cubrebocas para que mejor lo escucharán los presentes, militantes de Morena a quienes los azuzaron para manifestarse contra la coalición, Gerardo Albarrán Cruz, leyó un documento que él mismo denominó como “pronunciamiento Temixco”. En el cual, se le va a la yugular a su líder nacional, Mario Delgado, a quien calificó de insensible y además, lo responsabilizan de la alianza que ellos reprueban.
“En el convenio de coalición de Morena con el Partido Encuentro Social y Nueva Alianza, tanto el Consejo Estatal como la dirigencia en Morelos y las bases militantes, mantenemos nuestra postura a esta imposición disfrazada de alianza electoral”, señala el secretario general, Albarrán Cruz, quien refirió que las prácticas autoritarias y de imposición no solo frenan las prácticas democráticas sino con la transformación verdadera. Y por esa razón, reiteró que se niegan a hacer alianzas con partidos neoliberales y rancios por naturaleza, corruptos por definición e inoperantes y fallidos. Esta declaración estaría bien si esta misma postura la hubieran aceptado hace dos años, justamente cuando AMLO les impuso la coalición para ir juntos con Encuentro Social, sin embargo, jamás dijeron ni hicieron absolutamente nada en contra. Por lo tanto, al ver afectados sus intereses personales y de grupo, han decidido emprender una cruzada jurídico-política para obligar a Mario Delgado a que recule a estos acuerdos que se dieron en las más altas esferas de las cúpulas partidistas.
Por lo tanto, poco importó que el Tribunal Estatal Electoral haya avalado, lo mismo que el Impepac, la coalición Juntos Haremos Historia, y por ello, acudirán ante las últimas instancias como lo será la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, dedicándole tiempo y dinero a estas impugnaciones que a las precampañas que deberían estar haciendo y que en dos semanas estarán concluyendo para iniciar las campañas. Quiere, pues, Gerardo Albarrán, que su homólogo nacional Mario Delgado, venga a Morelos, se reúna con él, los órganos internos del partido y la militancia para que les informe por qué firmaron un acuerdo rancio en el que entregó la capital y Temixco.
Por lo pronto, hasta que no haya nada extraordinario la alianza sigue y por tanto, los acuerdos quedaron de la siguiente manera: Cuernavaca y Temixco para el PES; Tetela del Volcán, Yecapixtla y Tetecala a Morena; en tanto que Yautepec y Ayala sería para Nueva Alianza. En el resto irían solos.
LOS CANDIDATOS GANDALLAS DE MORENA.- Hace unos días, el secretario general en funciones de presidente de MORENA, Gerardo Albarrán Cruz y sus cercanos, le dieron juego a las declaraciones que hizo Citlalli Hernández Mora, secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional de este instituto político, sobre todo, porque habla de que en diversos estados del país, entre ellos Morelos, hay personajes que están tratando de aprovechar la preferencia electoral que tiene Movimiento de Regeneración Nacional para convertirse en candidatos a los diferentes cargos de elección popular, sin embargo, lo están haciendo de forma irregular, tratan de agandallarse y de beneficiarse sin importarles no tener los perfiles ni el mínimo de principios, congruencia y hasta con malos antecedentes. Por eso, la número dos del partido que fundó Andrés Manuel López Obrador, solicita a la militancia morenista para que denuncie y estén alertas con estos personajes que ponen en un alto riesgo la credibilidad de Morena. Para muchos, un caso ejemplar de lo que señala Citlalli Hernández es el ex candidato a gobernador por el PRI, Amado Orihuela Trejo, quien vio pasar sus mejores años en el tricolor donde se benefició económicamente con los cargos que alcanzó y de los espacios a los que colocó a sus incondicionales. Y ante la incertidumbre y nulas posibilidades que le vio al PRI de obtener triunfos importantes en lo subsecuente, decidió pasarse a Morena sin argumento alguno y en medio de fuertes cuestionamientos por sus nexos con gente de dudosa calidad.
Sin embargo, la dirigencia de Morena aprovechó la situación para seguirle tundiendo chulo y bonito a la coalición Juntos Haremos Historia y que integran a Encuentro Social y Nueva Alianza, argumentando que no es viable para su proyecto. Y es que el convenio de coalición que se firmó y que avalaron las dirigencias nacionales de los tres partidos, le quita a Morena las candidaturas a las alcaldías de Cuernavaca y Temixco, así como el distrito local electoral.
SINOPSIS.-
Diego Gómez, quien estuvo tapando minibaches ahora se ha dedicado a realizar pintas donde muestra su interés de convertirse en presidente municipal de Cuernavaca por uno de los dos partidos MAS…
Los parientes no tan pobres que han logrado beneficiarse durante años en el Congreso del Estado, Julio Espín Navarrete y su primo, Josué Espíndola, quienes pretenden el primero llegar otra vez al poder Legislativo y el segundo a la alcaldía de Puente de Ixtla (que dejó en ruinas su esposa Dulce), ambos por el Partido Progresa. Este instituto político está plagado de militantes que en su mayoría se enriquecieron siendo integrantes de la 53 legislatura local y los mismos que endeudaron por varios miles de millones de pesos a Morelos con los empréstitos que le autorizaron al ex gobernador perredista, Graco Ramírez Garrido Abreu y quienes además, participaron como candidatos a diversos cargos de elección popular en el 2018 y la gente les dio un portazo en la nariz, es decir, fue en las mesas receptoras del voto donde la población sacó todo su coraje y decidió darles la espalda por lo que todos, sin excepción alguna, perdieron de manera ofensiva pero pese a ello, de forma descarada, ya están de regreso.
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