Repaso - LOS ACOMODOS EN EL IEBEM

A Ana Lilia Carnalla Díaz, psicóloga de profesión, la conocí como catedrática en la Normal Superior Particular “Lic. Benito Juárez. Invariablemente supe de su compromiso y desempeño con los estudiantes que la tuvieron como maestra. En particular, su trabajo docente en la Licenciatura de Educación Especial, es altamente recomendable.

Quedé gratamente sorprendido al enterarme del nombramiento que recibió del director general del IEBEM, Eliacín Salgado de la Paz, como jefa del Departamento de Educación Especial. Esa es la información que recibí y, si es verídica, me parece que la designación de la maestra Ana Lilia es, de entrada, un acierto.

Hay otros nombramientos recientes en el IEBEM y considero que en su mayoría han sido pertinentes, si bien en lo general no se “desampara” a los funcionarios movidos a raíz de los acomodos que hasta el momento van.

Desconozco la trayectoria de Araceli Landa Botello, ahora encargada de despacho de la Dirección de Personal y Relaciones Laborales. Sin embargo, por comentarios recibidos de empleados que la han tratado, me refieren que tiene una trayectoria de trabajo y compromiso dentro del IEBEM. Se ganó la oportunidad, me comentaron.

A Leticia Gallardo Montiel la designó Eliacín Salgado como encargada de despacho de la Subdirección de Vinculación y Enlace, posición muy cercana al director general, que requiere sin duda capacidad y una elevada responsabilidad institucional. Supe que Gallardo Montiel fue directora de la Escuela Normal Rural “Emiliano Zapata” de Amilcingo, y posteriormente ocupó la titularidad del Departamento de Normales. De allí la acerca Salgado de la Paz para, seguramente, tenerla como colaboradora estratégica. De recio carácter, que la podría proyectar como poco empática, sus desempeños anteriores la recomiendan. Al menos esos es lo que me dicen.

De quien no pude obtener algún comentario, ni para bien ni para mal, es de Laura Elena Romero Pérez, quien ahora se desempeña como encargada de despacho de la Dirección de Administración. Alguien me comentó que antes se desempeñaba como tesorera, cargo seguramente importante pero poco lucidor.

El punto es que, tal y como se suponía, Eliacín Salgado de la Paz, puso manos a la obra para los cambios y acomodos. De éstos en otra columna hablaré, pues dan pie para analizar por qué se mantienen a individuos en algún cargo público, siendo que no dieron el ancho en el cargo del cual los remueven,

Aquí solamente me llama la atención la oportunidad que se le está dando al profesor David Suárez Solís, al nombrarlo responsable de la Dirección de Secundarias. Se desempeñaba como jefe del Departamento de Secundarias Técnicas. Controvertido, por su trayectoria profesional de claroscuros, de Suárez Solís lo que menos se esperaba era su fortalecimiento como autoridad educativa, He recibido algunos comentarios que no le favorecen, pero ninguno apoyado, hasta el momento, por alguna evidencia documental o por reacciones manifiestas en contra de su desempeño. Si el nombramiento que le otorgó Salgado de la Paz obedece sobre todo a los resultados exigidos, y no a esquemas de subordinación en grado de complicidad, David Suárez habrá de demostrarlo en los hechos. Va en juego su credibilidad, si es que le preocupa.

• De refilón

¿Qué fue lo que determinó la salida del contador Enrique López Lara Morales de la Dirección de Administración del IEBEM? Este es otro asunto que por sí mismo merece indagarse lo necesario para comentarlo en una futura entrega. No dejaré pasar la oportunidad de preguntárselo personalmente. A ver qué explicaciones tiene. Sobre todo, porque intuyo que el nombramiento de López Lara tal vez se decidió desde alguna otra oficina ajena al IEBEM y al área educativa, y porque fue evidente que una funcionaria cercana a Eliacín, adscrita al área de Finanzas, si no estoy equivocado, se confrontó abiertamente con López Lara.

Si a todo ello le sumamos los problemas que le han causado dolores de cabeza al gobierno estatal, sobre todo en los reclamos económicos de maestros por algún concepto mal interpretado, podría suceder que se aprovecharan estas circunstancias para sacarlo de la jugada. Ya veremos.

• Rebaba

No se me olvida: en el sindicato magisterial hay barruntos de tormenta. Los tambores de guerra ya se hacen escuchar.

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