Repaso - KARLA ALINE: ¿HABRÄ MEJORES TIEMPOS PARA EL COBAEM?

Con la llegada de Karla Aline Herrera Alonso como directora general del Colegio de Bachilleres del Estado de Morelos (Cobaem) se cierra un penoso período de grisura y mediocridad en la administración del servicio que dicha institución presta, merced a la apatía negligente de su antecesor, Víctor Raymndo Nájera Medina.

¿Habrá vientos renovadores en ese ámbito institucional de educación media superior? Es lo que se espera, según se advierte en las expectativas de varios empleados y docentes.

Interpretan que era necesario rescatar dicho subsistema de la modorra y la chatez imperante. Víctor Nájera, se dice, no estuvo a la altura de la responsabilidad asumida. En primer lugar, porque se le observaba falto de vocación, sin experiencia en la administración de una institución de esa naturaleza. De todo ello, uno no se explica cuáles fueron los compromisos para ubicarlo en ese puesto, conociendo de él sobre todo su paso como dirigente estatal del PRD o como diputado local. Pertenece o pertenecía a una izquierda claudicante, desacreditada ante la sociedad durante estos últimos tiempos.

El reto que ahora tiene su sucesora, Karla Aline Herrera, no es sencillo. Tiene la ventaja de haber sido recibida por la base trabajadora con buenas expectativas.  Salió de la dirección general del Conalep en el estado para desempeñar ahora una encomienda que le exige preparación, experiencia y sensibilidad. ¿La tendrá o será pan con lo mismo? 

Para bien del Cobaem, del personal adscrito allí y, sobre todo, de los alumnos, se espera que Herrera Alonso se ponga la camiseta y desempeñe con pertinencia las tareas inherentes a su nueva responsabilidad.

Por lo pronto, seguramente ya se enfrenta a asuntos de urgente solución, como las condiciones deplorables en las que está el edificio que rentan para las oficinas centrales o el más difícil aún, el de carácter financiero que ha ocasionado conflictos ante la falta de pagos de pensiones a trabajadores jubilados.

De refilón

Ya hace falta constatar en el sector educativo de la entidad visión enterada y de prospectiva que conduzcan a la obtención de resultados satisfactorios. Eso aún no se aprecia en el Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), que ha estado más en el ojo del huracán por los desaciertos de sus directivos, no exentos de sesgos y corrupción, cuestiones que poco les importa porque los señalamientos que se les hacen les entra por un oído y les sale por el otro. Al fin y al cabo, han de pensar, que con servir de tapete a personajes como Ulises Bravo aseguran su permanencia en los puestos que han sabido aprovechar muy bien para su santo. 

Por eso no responden, soberbios, a acusaciones tan graves como la que le endilga a Eliacín Salgado de la Paz el diputado aliancista Agustín Alonso, de prestarse para el acarreo de gente atendiendo a la solicitud de un personaje nefasto para Morelos, como es el hermano del cuasi gobernador Cuauhtémoc Blanco,

Y como de cínicos se trata, ahí tienen a Ulises Bravo en Yautepec echando pestes en contra de Agustín Alonso, pero sin referirse a la concentración masiva inducida en el World Trade Center, bajo el pretexto de promover la participación ciudadana en el proceso de revocación de mandato impulsado por el propio presidente Andrés Manuel López Obrador.

Rebaba

¿Qué proyectos de apoyo a la educación pública tiene el ayuntamiento capitalino presidido por José Luis Urióstegui? Sería interesante saberlo. Ojalá y no sean solamente acciones de remozamiento físico de algunos planteles. 

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