Repaso

• ¿Se pueden ocultar plazas docentes?

Una de las certidumbres que tienen los docentes incluidos en la lista de prelación que los considera idóneos para estar en posibilidad de obtener una plaza temporal o definitiva, es el ocultamiento de algunas de esas plazas; es decir, no se reportan ni se incluyen para asignarlas conforme a los resultados de un concurso de oposición. Suponen que la autoridad educativa las “guarda” para disponer de ellas y atender los compromisos que se tengan para ayudar o pagar favores a amigos, cómplices o familiares.

Hay quien me comenta que ha participado desde hace cuatro o cinco años en el proceso de examen y haber obtenido respectivamente distintos lugares en el orden de prelación, como para estar en posibilidad de recibir algún nombramiento, pero no ha corrido con suerte. “Los espacios que van apareciendo —me explica— no son reportados como disponibles al Servicio Profesional Docente, y entonces se dan al mejor postor”.

Por lo anterior, insiste, es que no hay suficientes plazas disponibles desde el Servicio Profesional Docente. “Pero eso sí, he comprobado que siguen llegando en manada nuevos profesionales a distintos centros de trabajo o incluso han incrementado horas”.

¿Será posible aclarar lo anterior? Correspondería a los funcionarios involucrados hacerlo, siempre y cuando su desempeño sea el correcto. Si sucede lo contario, tratarán de taparle el ojo al macho con actos simulados de transparencia y rectitud.

Para dilucidar este penoso asunto, parece que todos los caminos conducen a la Dirección de Personal y Relaciones Laborales, cuyo titular es Rafael Vargas Larios

. ¿Por qué desde allí? A ver si puedo explicarlo. Para el caso me referiré a lo que debe suceder en los distintos niveles educativos: preescolar, primaria y secundaria. Los responsables de cada área tienen la obligación de reportar todos los movimientos relacionados con los espacios disponibles para contratar a docentes, merced a los procesos pensionarios que atienden, las licencias recibidas o los permisos otorgados e incluso las plazas de nueva creación.

Luego deben reportarlo precisamente donde Vargas Larios es el jefe. El concentrado de las plazas disponibles se realiza allí y allí se sabe del total con el que se cuenta. La versión que se me dio es que ese total no es el que se recibe en el área del Servicio Profesional Docente. Llega “rasurado”, según me lo platicaron algunos maestros inconformes.

Pero como desde el IEBEM no van a soltar prenda, porque aceptarlo sería para ellos hacerse el harakiri, entonces les pidieron a esas maestras y maestros que recaben pruebas, con las que de algún modo puedan comprobar que se han dado nombramientos sin haber sometido a los beneficiarios a proceso de concurso alguno. En eso andan y algo han conseguido, aunque seguramente conseguirán otras presuntas evidencias.

Sostienen, por ejemplo, que una plaza se dio en esas circunstancias, para trabajarla en la Escuela Primaria “Ignacio Allende”, en el municipio de Axochiapan. En el oficio correspondiente, firmado por J. Isabel Téllez Pérez, director de Educación Primaria, y Rafael Vargas Larios, director de Personal y Relaciones Laborales, con fecha 16 de septiembre del presente año, se específica: “Alta provisional, del 16 de septiembre del 2019, hasta el 15 de diciembre de 2019… Sustituye a Martínez Sánchez Miguel… Motivo: Licencia pre pensionaria”.

Similar situación la detectaron también en la Escuela Primaria “Emilio Riva Palacio”, de Jiutepec, y en la Escuela Primaria “Niños Héroes”, de Zacatepec. Y puede haber más, muchas más.

Ante esas posibles evidencias, los docentes reclamantes sugirieron el retiro de todos esos nombramientos a maestros que no estaban en el proceso de admisión. La respuesta fue un rotundo no, si bien se les prometió que de ahora en adelante las plazas disponibles de los pre pensionarios serán ya para los que están en la lista de prelación. Se infiere que antes no se hacía así y entonces dichas plazas se empleaban al gusto de los directivos del IEBEM.

¿Qué tan cercana a la realidad es la anterior conclusión? No tardaremos en saberlo. Los docentes preocupados por los sesgos que adivinan en todo esto, mantienen una actitud y voluntad firmes para exigir la aplicación de las reglas establecidas para la asignación de plazas mediante concursos de oposición. Entre los acuerdos que han tomado es seguir acudiendo a las instancias necesarias para lograr procesos transparentes. Incluso, pueden tomar la decisión de trasladarse dentro de 15 días a la Ciudad de México, “ya que aquí hicieron caso omiso”.

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