Reconocimientos y castigos electorales

En opinión de Roberto Salinas Ramírez

Reconocimientos y castigos electorales

El tablero político cambió radicalmente en Morelos del que hubo de todo, ratificaciones contundentes a gestiones como las de Juan Ángel Flores Bustamante en Jojutla, Rafael Reyes Reyes en Jiutepec y las familias Alonso en Yautepec y Sánchez en Yecapixtla. Solo la Diputada Ariadna Barrera fue reelecta al igual que las cinco diputaciones federales de Morelos que ratificadas para Morena.

Los rechazos también fueron claros, principalmente a la gestión gubernamental del Partido Encuentro Social que quedará sin ninguna representación en el Congreso local, con posibilidad de perder su registro y con 6 municipios para gobernar, tres para Encuentro Social (Temixco, Zacatepec y Tepalcingo) y tres para Encuentro Solidario (Jonacatepec, Temoac y Zacualpan). El PES pasó de dos Diputados elegidos en 2018 (Alfonso Sotelo y Maricela Jiménez) a cinco artificiales en 2021 (sumados Andrés Duque, Marcos Zapotitla, José Luis Galindo y Érika García). A partir de septiembre, se quedará sin representación en el Congreso.

El Partido Acción Nacional gobernará a la mayor parte la población municipal con 6 presidencias municipales (Cuernavaca, Emiliano Zapata, Ayala, Yecapixtla, Atlatlahucan y Ocuituco) que suman 675,897 ciudadanos y representan el 34.3%. Morena gobernará a 648,007 ciudadanos en 9 municipios (Jiutepec, Cuautla, Jojutla, Tlaltizapán, Puente de Ixtla, Axochiapan, Tlaquiltenango, Tetela del Volcán y Tetecala) que representan el 32.9%. En tercer lugar, con 229,712 ciudadanos gobernados por los PECES en 6 municipios que representan el 12% de la población. El PRI gobernará 123,509 ciudadanos en 4 municipios (Xochitepec, Huitzilac, Miacatlán y Mazatepec) que representan el 6.3% de la población. Nueva Alianza gobernará a 118,530 habitantes en dos municipios (Yautepec y Totolapan), el 8.9% de la población será gobernado por otros partidos políticos, por usos y costumbres y por un independiente (Coatlán del Río).

En este cambio electoral pueden leerse diversos mensajes a los políticos de la entidad, entre ellos y quizá el principal, en el que los ciudadanos no están de acuerdo en la forma en como se ha administrado el estado por parte el Partido Encuentro Social y su gobernador Cuauhtémoc Blanco, en segundo lugar, la poca credibilidad en el Congreso morelense y en tercer lugar el rechazo o reconocimiento a las gestiones municipales.

Los resultados electorales dan también a los ciudadanos la seguridad de que la democracia, permite recompensar o castigar el desempeño gubernamental y que, a través de ella, se pueden dar mensajes a quienes nos gobiernan.

Con estos cambios electorales los ciudadanos debemos entender que sí es posible incidir en la evaluación, reconocimiento o rechazo de políticos, pero lo más importante, es que no podemos esperar otros tres años a evaluar, premiar o rechazar políticos. Es urgente que participemos activamente en la vida política de nuestro estado, que nos involucremos en la rendición de cuentas, que exijamos a los ahora funcionarios electos su plan de trabajo y compromisos para que desde el primer día de su cargo los estemos evaluando.

Es momento de hacer valer la participación ciudadana, es momento de ser parte de la democracia y de tomar las riendas de nuestro estado de forma responsable y colaborativa.