Observador político - Bromas y vaciladas en los registros de Morena a la gubernatura

En opinión de Gerardo Suárez Dorantes

Observador político - Bromas y vaciladas en los registros de Morena a la gubernatura

En días recientes, los pasillos de la política en Morelos se llenaron de una energía peculiar, algo muy difícil de ver hoy en día; y es que, como si se tratara de un juego, varios aspirantes y "suspirantes" se apresuraron a registrar sus nombres en la lista de quienes buscan la candidatura a la gubernatura. Aunque algunos de ellos parecen haber perdido el sentido y la razón de la vergüenza, ya que su participación no es sorprendente en un sistema político donde las ansias de poder a menudo supera cualquier sentido de la realidad.

BUSCAN 19 POR MORENA LA GUBERNATURA.- Los días lunes y martes de esta semana marcaron el plazo establecido por el Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) para el registro de aquellos que aspiran a coordinar los comités en defensa de la Cuarta Transformación (4T) en Morelos, evidenciando que casi una veintena de personas decidieron tomar parte en esta carrera, la cual incluye no solo la gubernatura, sino también otros espacios como senadurías, diputaciones federales y locales, alcaldías e incluso hasta regidurías.

Lo que llama la atención es que muchos de estos aspirantes dejaron su registro hasta el último minuto, en un aparente intento por mantenerse en el anonimato y evitar la exposición pública de sus ambiciones. Sin embargo, una vez registrados, no perdieron tiempo en proclamar su victoria antes de que se haya dado un solo voto en sus redes sociales con escasos seguidores.

Tomemos el caso de Diego Gómez, quien parece haber caído en una ilusión peligrosa al afirmar que ya ganaron, sobre todo, cuando su registro ha sido considerado por muchos como una mera vacilada. ¿Qué impulsa a alguien a afirmar semejante cosa antes de siquiera comenzar la contienda?

Es importante recordar que estos registros se realizaron en el contexto de una convocatoria emitida por Morena, pero que también involucra a aliados políticos de la coalición "Juntos Haremos Historia"; en la cual, incluye al Partido del Trabajo, al Partido Verde Ecologista y a Nueva Alianza, busca unificar fuerzas para el proceso electoral de 2024.

En total, se registraron oficialmente 8 mujeres y 11 varones. Aunque la diversidad de género es un aspecto positivo a destacar, la verdadera pregunta que debemos hacernos es si estos aspirantes están verdaderamente comprometidos con servir al pueblo o si solo buscan un nuevo hueso y no dejar de vivir del presupuesto público.

En momentos en que el país enfrenta desafíos significativos en áreas como la salud, la educación y la seguridad, es fundamental que los candidatos y candidatas ofrezcan propuestas sólidas y un compromiso genuino con el bienestar de la sociedad, algo que les falta al menos a las dos terceras partes de los que se registraron, y en lugar de afirmar que "ya ganaron", deberían recordar que la verdadera victoria es servir con honestidad y responsabilidad a quienes confíen en ellos en las urnas.

Es hora de que los ciudadanos analicen detenidamente las propuestas y trayectorias de estos aspirantes, separando el discurso vacío de la acción efectiva. La política no debe ser un juego de egoísmo y ambición desmedida, sino un compromiso real con el progreso y la mejora de la vida de las personas.

ASPIRANTES FUERTES Y DÉBILES.-

 

 

 

 

En el panorama político de Morelos son varias figuras las que han emergido como posibles contendientes para el cargo de gobernador/a en las próximas elecciones; mientras que algunas de ellas han estado trabajando arduamente para ganarse la confianza de diversos sectores de la población, otras han pasado desapercibidas en sus responsabilidades públicas. Hay algunos casos de algunas de estas figuras y sus perspectivas:

Margarita González Saravia y Lucía Meza han estado recorriendo el estado durante meses, logrando acuerdos con diversos sectores de la población; este esfuerzo conjunto las ha convertido en fuertes precandidatas al cargo de gobernadoras y sucesoras de Cuauhtémoc Blanco Bravo. Su trabajo incansable y su capacidad para forjar alianzas son cualidades valiosas en el competitivo mundo de la política.

Por otro lado, Sandra Anaya Villegas, la secretaria de Administración, parece haberse sumado a la carrera en el último minuto, y sus posibilidades son escasas en comparación con las demás contendientes; su entrada tardía plantea interrogantes sobre su capacidad para liderar el estado al igual que el poco tiempo de estar laborando en la administración pública.

En tanto que las diputadas federales Brenda Espinoza y Juanita Guerra Mena, por otro lado, han sido criticadas por su falta de iniciativas efectivas y un trabajo que, según se informa, se ha centrado más en mayoritear a la oposición que en abordar las necesidades reales de sus comunidades; ninguna de las dos se ha querido comprometer con exigir resultados por la grave situación de inseguridad en la entidad y diversos problemas más, lo que evidencia un alejamiento de los conflictos sociales del estado y que ahora, intentan gobernar. Su desempeño insatisfactorio no las favorece en esta contienda porque tampoco son reconocidas.

La legisladora local Edi Margarita Soriana parece haber pasado desapercibida en su labor en la Legislatura LV, y si tiene o no ausencias en sesiones tal parece no tener ningún impacto; su falta de participación activa plantea interrogantes sobre su compromiso con el servicio público.