¡No al aumento de las tarifas de agua potable!
En opinión de Mirna Zavala
Todos somos conscientes de las dificultades económicas que atravesamos debido fundamentalmente a la crisis económica generada por la pandemia. Las políticas económicas restrictivas tomadas por las diferentes naciones para atender las crisis económicas internas fueron modificando las relaciones comerciales internacionales. El desabasto y la producción limitada por la falta de materias primas fue dando pauta a una inflación generalizada, que en nuestro país estamos resintiendo y vemos reflejada en el aumento en el costo de los productos, bienes y servicios.
Derivado de lo anterior, el encarecimiento de la vida, particularmente en el último año, que además se estima continuará por todo el 2023, finalmente constituye una problemática grave para los mexicanos y los morelenses, particularmente de quienes menos tiene, de quienes van al día y luchan por llevar el sustento a sus hogares.
En estas condiciones las instituciones también encuentran en esta problemática las dificultades propias para abastecer los servicios que deben llevar a los hogares morelenses, no cabe duda que el desafío es mayúsculo.
Desafortunadamente, una de las primeras decisiones que toma un alcalde para superar las necesidades económicas y proveer mejores servicios es el incremento en el costo de los servicios, tal es el caso de Cuernavaca, donde se evalúan aumentos en el costo del agua y del impuesto predial.
No es momento de aumentar la carga económica a las familias de nuestros municipios, es preciso incrementar las medidas de austeridad, eficiencia y oportunidad en todas las áreas de las administraciones municipales. Es tiempo de aumentar la capacidad creativa de los alcaldes y sus equipos como primer medida de eficiencia gubernamental.
De ahí el llamado al presidente municipal de nuestra capital a NO AUMENTAR las tarifas del agua potable y tampoco del impuesto predial. En el primer caso, de acuerdo a declaraciones públicas se justifica el aumento argumentando que no se han subido en varios años, una visión simplista y poco seria y profesional de la problemática que enfrenta el SAPAC. En el caso del impuesto predial el argumento es el mismo, no se habla de aumento al impuesto predial sino de actualización de los valores catastrales, cuyo efecto es aumento. Desde mi representación legislativa me opondré a dichos aumentos. Que tengan un buen mes de febrero.
MIRNA ZAVALA