Morelos, el reino de las 'escuelas aventureras'
En opinión de Tania Jasso Blancas
Me gustaría hablar sobre un tema que nos afecta a todos, y lo haré con un toque sarcástico y divertido, aunque el tema no lo amerite. La educación en Morelos.
Morelos, esta joya en el corazón de México donde parece que el sistema educativo ha decidido embarcarse en una emocionante aventura. ¿Recuerdan esas historias de exploradores valientes que se lanzan a lo desconocido? Bueno, aquí en Morelos, los estudiantes y maestros parecen vivir esa experiencia todos los días.
Empecemos por los recursos: ¿Quién necesita libros de texto cuando se puede aprender a través del poder de la improvisación? En Morelos, las escuelas son verdaderas maestras en el arte de hacer malabares con los recursos. No hay suficientes sillas para todos los alumnos, pero no te preocupes, porque el alumno puede aprender a equilibrarse de manera sorprendente en las mesas o incluso en el suelo. ¡El equilibrio es una habilidad vital en la vida, después de todo!
Pero no se preocupen, porque aquí en Morelos siempre encontramos una solución ingeniosa para cada problema. Si no hay suficientes maestros, simplemente se juntan dos o tres grados en un solo salón. ¡Imaginen el nivel de socialización y multitarea que se desarrolla en esas aulas! Nuestros estudiantes son verdaderos expertos en equilibrar el aprendizaje de matemáticas ciencias y español mientras intentan no pisarse los pies.
Y no podemos olvidar mencionar las famosas "aulas de lujo" de Morelos. Sí, esos salones con goteras y paredes que parecen competir por ver cuál se desmorona primero. ¡Es toda una experiencia para los estudiantes amantes de la arqueología! Y que me dicen de las paredes finitas, perfectas para mejorar las habilidades de escucha y compartir información con el salón de al lado. ¡La privacidad es sobrevalorada!
Ahora, no puedo negar que a pesar de todos los desafíos y las situaciones peculiares que enfrentamos en nuestras escuelas, también hay algo encantador en esta experiencia. Nuestros jóvenes estudiantes se convierten en verdaderos expertos en adaptabilidad y resiliencia. Si pueden superar una clase en un salón con goteras, ¡pueden superar cualquier cosa que la vida les presente!
Además, la falta de recursos nos lleva a ser verdaderos magos de la imaginación. Nuestros maestros tienen la capacidad de convertir cualquier objeto en una herramienta educativa. ¿No hay libros? No hay problema. Usaremos cajas de cereal como material de lectura y la cocina como laboratorio científico. ¡Las posibilidades son infinitas!
Pero, dejando de lado las bromas y el sarcasmo, es importante reconocer que la situación de la educación en Morelos y en todo México es un problema real y no debemos conformarnos con esta realidad. Nuestros niños y jóvenes merecen una educación de calidad, con instalaciones adecuadas, maestros bien capacitados y recursos suficientes. Es fundamental que se invierta en la educación, porque solo a través de ella podremos construir un futuro próspero y equitativo para todos.
Así que, queridos lectores, mientras nos reímos un poco de las "aventuras" que enfrentamos en las escuelas de Morelos, no olvidemos que es nuestro deber exigir un cambio. Hagamos oír nuestras voces, presionemos a las autoridades y exijamos una educación de calidad para nuestros niños y jóvenes. Juntos, podemos convertir esta 'aventura educativa' en un sistema que realmente les brinde las herramientas que necesitan para triunfar.