El Tercer Ojo - Día mundial de la Afasia

En opinión de J. Enrique Alvarez Alcántara

El Tercer Ojo - Día mundial de la Afasia

Estimados lectores que siguen El Tercer Ojo, esta ocasión quiero compartir con ustedes la efeméride relacionada con el conjunto de síndromes o trastornos relativos a la “Afasia”.

 

Cada día 28 de junio se conmemora el  Día Mundial de la “Afasia”, fecha escogida porque en en un día como hoy nació el antropólogo y neurólogo francés Pierde Paul Broca, quien describió el caso de un paciente (el personaje “Tan”) el cual, a causa de una alteración en la región frontal del hemisferio izquierdo del cerebro, “perdió la competencia pera expresarse fonéticamente; a esta “alteración” Broca le denominó “Afemia” (1871). Posteriormente el neurólogo, también francés, Armand Trousseau, consideró que el término propuesto era inadecuado, por ello sugirió el concepto de “Afrasia”. Más tarde se concibió que el mejor sustantivo era “Afasia”.

 

Once años más tarde (1874), el psiquiatra alemán Karl Wernicke describió otro caso de un paciente que, debido a una lesión también en el hemisferio izquierdo, pero hacia su región temporal izquierda, perdió la capacidad para “comprender” el lenguaje hablado, sin mayores consecuencias en la expresión.

 

A partir de ese momento se comprendió que el “lenguaje” implicaba dos procesos claramente diferenciados; la expresión y la comprensión del lenguaje articulado fonéticamente. Asimismo, se asumió que había dos manifestaciones de las ”alteraciones” del lenguaje secundarias a lesiones cerebrales; las alteraciones en la expresión del lenguaje y las alteraciones en su comprensión. Léase, las afasias expresivas o impresivas del lenguaje; por eponimia: Afasia de Broca y Afasia de Wernicke.

 

Desde ese entonces se trató de diseñar un modelo que. permitiera explicar y comprender.las  afasias. Al modelo construido en esa época se le conoció como el “Modelo Lichtensteim-Wernicke”, modelo que, por lo demás, fue descalificado como inverosímil e inválido por Sigmund Freud (1892), en su tratado La Afasia.

 

A lo largo del siglo XX y lo que llevamos del XXI nuevas descripciones, clasificaciones, modelos explicativos y supuestos se han diseñado y elaborado. Sin embargo, la prevalencia de los síndromes afásicos incrementa alarmantemente. No sólo las guerras, las enfermedades del cerebro, las enfermedades que acarrean daños encéfalicos o los eventos traumáticos cerebrales y craneales, el envejecimiento normal y patológico, etcétera –males superlativos de nuestra era– los hacen engrandecer y ser percibidos como una problemática a tratar urgentemente.

 

Si adicionamos a ello el alarmante incremento de la presencia de los procesos demenciales y su acompañamiento de alteraciones, entre otras, de los procesos de expresión y comprensión del lenguaje, además de los eventos amnésicos y psicológicos, en general, podremos comprender la trascendencia de prestar atención a la presencia impresionante de personas y familias que tienen que vérselas con la presencia de la afasia.

 

Pues bien, no era necesario que debido a diagnósticos erróneos en personajes estadounidenses mediáticamente fuese posible voltear la cabeza y la mirada hacia esta calamidad. Sin embargo, pese a mi reticencia, se miro hacia un lugar que solemos mirar poco, o nada, valió la pena que ae hiciera de este modo.

 

Cabe resaltar el hecho de que en honor de Pierre Paul Broca se sugirió esta fecha conmemorativa, pues en un día como este nació, no únicamente esa región del cerebro es denominada como área de Broca y, consecuentemente, la afasia expresiva, se conoce como afasia de Broca, sino también el personaje que marcó un sendero por cruzar.

 

Vaya pues este recordatorio para invitar a no olvidar y a estar atentos.