Juego de Manos - Primera fisura

No le hagan caso a Gatell, no le crean al modelo centinela y mucho menos confíen en la Secretaría de Salud.

En su noticiero “Hechos Noche” el conductor (y, al parecer, epidemiólogo) de TV Azteca, Javier Alatorre, hizo un llamado a los televidentes a no hacer caso al subsecretario de prevención y promoción de la salud, Hugo López-Gatell. Esto con la justificación de que, de acuerdo con su perspectiva, los datos proporcionados durante los informes diarios de covid-19 son falsos y han sido negados por ejecutivos estatales. Para ejemplificar lo anterior, el presentador utilizó a Jaime Bonilla, gobernador del estado de Baja California, quien ha argumentado que los números que se dan acerca de su entidad en las conferencias no están actualizados, y llevan así por varias semanas. Al respecto, funcionarios, figuras públicas y el propio presidente han manifestado su desacuerdo con el mensaje de Alatorre.

Asimismo, se señaló dentro del espacio que el subsecretario había desmentido su propia información durante una entrevista con el Wall Street Journal; sin embargo, en dicho espacio el funcionario señaló que la letalidad del virus es menor que la de la influenza y que tan solo el 0.5% de la población presentará síntomas —cifra que asciende a más de medio millón de pesonas—. Esto es interesante, pues no toma en consideración que el riesgo de contagio no se reduce a las personas que presentan síntomas, puesto que hay un alto número de personas asintomáticas que también pueden transmitir el virus; ni toma en cuenta que en el país ya hay más de medio millar de defunicones por el virus, y el número solo irá en aumento.

Este hecho es interesante por varios factores. En primer lugar se encuentra la fuente de la que salen las declaraciones TV Azteca, segunda televisora más grande del país, es propiedad de Ricardo Salinas Pliego, miembro del consejo asesor empresarial del presidente de la República. Este empresario se ha negado a cumplir con las medidas de sanidad en sus empresas para que sus actividades sigan con normalidad. Asismo, el multimillonario cercano al presidente de la República, ha mostrado su apoyo a los llamados de Andrés Mauel López Obrador a mantener la calma. ¿Se acabó el amor?

Los intereses de Salinas Pliego, evidentemente, van en contra de las advertencias y recomendaciones emitidas por la Secretaría de Salud que es encabezada, figurativa y mediáticamente, por Hugo López-Gatell. Los comentarios de Alatorre obeceden a intereses de la empresa.

Por otro lado, es llamativo observar que la luna de miel de México con López-Gatell sufre su primer golpe. Esto no ha sido suficiente para cabar con el romance, pero puede haber sido suficiente para roper el hielo de un personaje que ha sido incuestionable durante esta emergencia. La Espiral del Silencio muestra su primera fisura, estemos pendientes a la presión que se ejerce sobre ella.

Ahora bien, hacer un llamado a ignorar los comunicados de la Secretaría de Salud en el momento en que el país atraviesa una emergencia sanitaria es sumamente irresponsable. Por más que se dude de los datos que se brindan, no hay otra institución en el país que se encargue de atender la amenaza a la salud que vivimos. En este momento, pensar que es mejor seguir el ejemplo de otros países no nos llevaría a ningun lado pues las mismas medidas de prevención sanitaria que se aplican en nuestro país se están aplicando en otros, la temporalida en que estas se aplicaron se cuece aparte.

Hay que tener presente que a este virus apenas lo estamos conociendo en todo el mundo, por lo que no podemos esperar que se den los mismos pronósticos y tratamientos que se dan con enfermedades ya conocidas como la influenza o la gripe. La falta de respuestas claras, de estimaciones y plazos fijos o de acciones concretas a realizar parten de los avances en el estudio del covid-19, de su comportamiento y de su transmisión. Si bien dudar de la información que se da es válido, deslegitimar por completo las cifras y medidas anunciadas en las conferencias sería entrar en un complejo de deidad del que no nos podemos dar el lujo.

You shall not pass! / ¡Tú no pasarás!

En más de dos centenas de municipios el país, pobladores ha cerrado el acceso a personas ajenas a su comunidad o que sospechan pueden ser transmisores de covid-19. En Morelos: Tepoztlán, Tlayacapan, Tetela del Volcán, Hueyapan y Ocuituco han prohibido el acceso a turistas y foraneos, solicitando, en algunos casos, una identificación válida que demuestre que residen en dicha entidad, que forman parte de actividades esenciales o que no representan un riesgo a la salud de la comunidad.

Estos fenómenos obedecen a dos lógicas. Primero, al miedo social desatado por una enfermedad que seguimos conociendo día con día y que genera una gran incertidumbre en cuanto a las medidas que se toman y la temporalidad de las mismas. Después, están intimamente relacionados con la deficiencia infraestructural y humana que tiene el sistema de salud mexicano (a nivel local y nacional) y que, por ende, supone un enorme riesgo para la población (vulnerable o no) que se encuentra en las zonas menos urbanizadas del país.

Bien dicen que el miedo no anda en burro, por ello pudimos ver una movilización rápida de una amplia parte de la población, más veloz aún que la adopción de medidas por parte de las autoridades. Este es un momento extraordinario en la historia del mundo y las acciones adoptadas por la ciudadanía (con excepción de algunos vergonzosos casos) obedecen a la naturaleza de la emergencia.

Por cierto

A pesar de las desafortunadas declaraciones realizadas en TV Azteca, es importante seguir las medidas de prevención de la manera más estricta posible. De acuerdo con estimaciones de la Secretaría de Salud, el pico de infecciones en el país será entre el 8 y el 10 de mayo, por lo que nuestro cuidado en las siguientes semanas será fundamental para que las consecuencias de este brote sean menos desastrosas. Asimismo, la Jornada Nacional de Sana distancia se extenderá hasta el 30 de mayo, aunque la cuarentena se podrá terminar el 17 del mismo mes en municipios con poco riesgo de infección. Estas localidades están siendo definidas por las autoridades de salud y están sujetas a cambiar según se vaya moviendo el virus.

Este es uno de los más grandes retos que hemos enfrentado como sociedad. A pesar de que el horizonte se vea oscuro, hay que tener presente que este mal tiempo va a pasar. Vamos por un rato más en casa, tomando las precauciones necesarias en caso de tener que salir. Las precauciones que tomemos hoy pueden salvar vidas mañana.

A palabras necias –como las de Alatorre–, oídos sordos: 

diegopachecowil@gmail.com