El Tercer Ojo - Breve historia de la medicina y de la relación médico-paciente (trigésima primera parte)

En opinión de J. Enrique Álvarez Alcántara

El Tercer Ojo - Breve historia de la medicina y de la relación médico-paciente (trigésima primera parte)

 

Hacia los orígenes y desarrollo de la psiquiatría, neurología y neuropsicología

 

Tratando de ir cerrando la parte correspondiente a los orígenes y el desarrollo de la psiquiatría, debo señalar que ésta, como rama de la medicina, fue una de las herramientas predilectas de los psiquiatras, dedicada a la clasificación y determinación de los grupos de personas que debieran ser eliminadas por no corresponder con las aspiraciones nacionalsocialistas.

 

Vayan como botón de muestra algunos ejemplos presentados por Edith Sheffer en su libro Los Niños de Asperger.

 

Primer caso: “Gerhard Kretschmar nació el 20 de febrero de 1939 (…). Era ciego, sólo había desarrollado completamente un brazo y una pierna y tenía convulsiones. Sus padres lo llamaron ‘Monstruo’. Le escribieron a Hitler pidiéndole permiso para matarlo y éste envió a Karl Brandt, su médico personal, para que examinara al niño. Brandt declaró ‘idiota’ a Gerhard, de cinco meses. Se le dio al bebé un barbitúrico y murió de tres a cinco días después, el 25 de julio de 1939”.

 

Edith Sheffer expresa, no sin asombro, que el término ‘eutanasia’ era erróneo, ya que la mayoría de los niños asesinados no padecía enfermedades terminales y pudieron haber vivido muchos años más.

 

Segundo caso: “Christine Berka fue canalizada a la clínica de Asperger por comportamiento supuestamente antisocial, tenía casi 14 años (…) era vienesa y fue evacuada de la ciudad hacia un campamento para escapar del bombardeo de los Aliados. También estaba escapando de una terrible relación con su madrastra, quien estaba muy feliz de deshacerse de ella (…). Karoline Reichart, directora del campamento en la Baja Austria, expulsó a Christine en mayo de 1942 describiéndola como una paria, Christine ‘constantemente se quedaba sola y pensativa, y no podía entablar relaciones sociales. Reichart dijo que ‘nadie quería ser su amiga’ o compartir habitación con ella además era ‘¡vengativa con sus compañeras!’, según la directora otro problema era que Christine les robaba a las otras niñas. La madrastra denunció todo su comportamiento (…) Reichart reportó a Christine con la Oficina Distrital de Bienestar de donde la trasferirían a la Clínica de Educación Curativa de Asperger para su evaluación (…) el 14 de julio de 1942 la Clínica determinó que Christine tenia un ‘carácter muy antisocial’ (…) después de siete semanas de evaluación se solicitó su transferencia a una institución correccional (…) la conclusión de esta evaluación fue que Christine carecía de conexiones emocionales o espirituales con los demás. ‘No tenía Gemüt’”.

 

Al parecer, como expresa Edith Sheffer, a Christine no sólo se le trató inhumanamente, también se le deshumanizó antes de ser institucionalizada y, sin duda alguna se le diagnosticó con psicopatía.

 

No puede afirmarse que con la liberación de Europa de la opresión Nazi y Fascista termina el periodo amargo de la psiquiatría. Bástenos para cerrar este capitulo referir los orígenes y desarrollo del Movimiento Antipsiquiátrico surgido durante la posguerra y que a través de la figura del psiquiatra italiano Franco Basaglia trataremos de describir.

 

No quiero dejar de agradecer a la Dra. Sylvia Marcos, quien me obsequió la versión portuguesa de sus conferencias dictadas en Brasil a este respecto.

 

Durante la primera conferencia, intitulada As Técnicas psiquiátricas como Instrumento de Libertação o de Opressão expresa que: “Tendencialmente la psiquiatría es siempre opresiva. Es una manera de plantear una herramienta de control social y, a partir de este enfoque, el asunto se torna más complejo”.

 

En una segunda afirmación sostiene que, en realidad, “La Historia de la Psiquiatría es la Historia de la Psiquiatría y no la historia de quienes sufren trastornos mentales. Desde 1700, dice Basaglia, ese tipo de situaciones se encuentran ligadas indisolublemente al paciente y su médico, creando una situación de dependencia de la cual el paciente no ha logrado aún liberarse”.

 

Finalmente, sentencia Basaglia: “La psiquiatría no ha sido más que una horrible copia de la medicina, una copia en la cual el paciente aparecerá siempre como un ser dependiente del médico que lo trata.”. (Continuará)