Designaciones en Morelos

En opinión de Roberto Salinas

Designaciones en Morelos

Morelos está inmerso en un deterioro institucional ocasionado por decisiones políticas y personales desde el Congreso. No se pueden cambiar los resultados de las instituciones públicas cuando se tiene al frente a funcionarios que pagan cuotas a quienes los pusieron al frente, a funcionarios que deben su cargo, sueldo y uso de recursos a los grupos políticos que contralan las decisiones y designaciones.

Tener amigos, familiares o incondicionales en órganos “autónomos” es un pagaré que se puede cobrar cuando el “allegado” de los legisladores o de los poderes sea parte de las decisiones institucionales. Con ello,  aseguran impunidad y permanencia de la corrupción.

Así las Fiscalías general y anticorrupción, el Instituto de transparencia (IMIPE) la auditoría (ESAF), la Comisión de Derechos Humanos, la Comisión de Selección del Sistema Anticorrupción y los Magistrados del Tribunal Superior de Justica de Morelos deben ser elegidos a través de procesos abiertos, profesionales, transparentes y con participación ciudadana.

Los cargos mencionados, deben dejar de ser vistos como un botín y un reparto de poder, posiciones, impunidad y recursos, deben ser espacios de verdadera representación ciudadana y fortalecimiento de las instituciones.

Las designaciones públicas deben incluir transparencia sobre el proceso de elección, perfiles idóneos de los puestos, publicar currículums de los aspirantes, realizar comparecencias y deliberaciones públicas, es necesario también incluir participación ciudadana, haciéndose llegar de opiniones de asociaciones civiles y académicos conocedores del tema. Finalmente, las decisiones de cada legislador deben estar acompañadas de evidencia y fundamento, su voto debe ser público, debatido y sustentado.

Si bien esto podría asegurarse con una modificación constitucional, nada impide que adopten procesos transparentes con estándares transparentes. Si los legisladores ven que los ciudadanos no hacen nada y se quedan callados, continuarán tomando decisiones que nos lastiman a todos.

Por eso es fundamental que, de ahora en adelante, se realicen procesos transparentes, abiertos y profesionales en Morelos para que las instituciones públicas sirvan a los ciudadanos y detengan el deterioro que se han generado durante años. La vigilancia y exigencia ciudadana será fundamental.