Cuando sea demasiado tarde… - Otro Tutti Frutti semanal.

Muy buen día, apreciado lector. Nuevamente tenemos oportunidad de encontrarnos por aquí, pásele a lo barrido que esta semana marcó, entre varias cosas, el final del periodo ordinario de clases en mi gloriosa Universidad Autónoma del Estado de Morelos. Estuve revisando mis apuntes de la semana para decidirme por un tema en particular para la columna de esta semana, y decidí que la temática está suficientemente polivariada como para hacer otro tutti frutti, por lo que no perdamos más caracteres y vamos allá, antes de que sea demasiado tarde.

            Como siempre comenzamos en lo internacional, la cosa en el conflicto Palestina-Israel simplemente no cede. Esta semana hubo un intercambio de rehenes israelitas a cambio de presos palestinos, y debo admitir que las imágenes son muy emotivas. Insisto en que mi conocimiento del tema, aunque ha crecido bastante las últimas semanas, no me alcanza para poner una postura política al respecto. Sin embargo, sí me parece que los israelitas tienen fuerzas muy superiores a los palestinos, y estos han reaccionado escondiendo a las fuerzas armadas entre la población civil, lo que ha ocasionado pérdida de vida inocente al por mayor. Personalmente opino que ambos lados están equivocados y jamás van a llegar a una solución a través del conflicto armado, pero la diplomacia debería caer sobre la parte que tiene mayor fuerza, y tendría que ser Israel los que comenzaran con el cese al fuego en virtud de que todo lo que han conseguido es masacrar a miles de no-combatientes. De los doce mil muertos reportados en Gaza, el New York Times (mi segundo periódico favorito, después de El Regional) manifiesta que más de ocho mil corresponden a mujeres y niños.

            La escena nacional también trajo sus sorpresas. Arrancan las pre-campañas de algo que denominan democracia pero que verdaderamente no veo para dónde vaya a acabar la cosa. ¿Pre-campañas, de qué, me pregunto? Si ya todo está decidido y no queda más que esperar a que lleguen las campañas de verdad y esperar a que esas también concluyan para todos acudir a votar de mala gana, asqueados por completo de la política mexicana en su totalidad, y de todas maneras vivir el operativo mapache de cada seis años. Para darle un poco más de folclor a la circunstancia, la cosa en Nuevo León se puso harto interesante: al parecer, Samuelito siente que ya se ganó sus big boy pants y quiere competir por la grande. ¿Quién dijera? De cargar los palos de golf del papá con una gran resaca, a aspirar a dirigir personalmente el hundimiento del Titanic. La nota de la semana en este respecto la dejaron, por un lado, el impresentable de Vicente Fox (el primer presidente de alternancia que tuvo este país) tuvo a bien a llamar “dama de compañía” a la esposa del Samuelito, cosa que le ganó que le suspendieran su cuenta de X (antes Twitter). Yo no sé que pretendía ganar con tal gesto, pero por lo menos ya se ganó mi hastío y el de muchos de nosotros, lo bueno es que ya nos lo estaremos encontrando en menor medida. Por el otro, también trascendió que hubo zafarrancho en la cámara de diputados de por aquellos lares, al respecto de la designación del gobernador interino, en lo que se decide si Samuelito puede llegar a la grande. No hay consenso sobre si alguien accionó un extinguidor o si detonaron una granada de humo, pero yo sigo esperando mi sueldito de cincuenta mil pesos.

            Ya más en lo local, trascendió que en Morelos la delincuencia está simplemente imparable. Varias escuelas decidieron suspender sus actividades por el miedo, hasta una Facultad de mi universidad decidió suspender sus actividades presenciales derivado del secuestro de una de sus profesoras, pero ya no encontré más notas al respecto. Ojalá aparezca la compañera con bien, y las cosas se arreglen un poco. ¿Recuerdan que mencioné el efecto que tendría la tragedia en Acapulco en la geografía social de Morelos? Pues hoy en día ya no puede ir uno al Oxxo sin que lo asalten.

            Ya para terminar, el viernes tomó protesta la Dra. Viridiana Aydeé León Hernández como la primer mujer Rectora de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos para el periodo 2023-2029. Serán años de mucho trabajo y muchos retos qué cumplir. Muchas felicidades a la Dra. León, estoy seguro de que este sexenio traerá cosas muy buenas para nuestra amada UAEM.

Así que como siempre, apreciado lector, si no tiene que salir, le ruego que no lo haga. Ya ve usted que las obras que mantuvieron cerrada Av. Universidad por meses enteros no aguantaron ni la primera lluvia. Porque la infraestructura en Cuernavaca no ha muerto, pero por lo menos no quitaron los puentes peatonales.