Árbol inmóvil - La veisalgia (cruda) electoral

En opinión de Juan Lagunas

Árbol inmóvil - La veisalgia (cruda) electoral

Tras la jornada del 6 de junio (copiosa, según el árbitro), se instaura la resaca electoral. Trasladando el padecimiento hacia los términos comiciales, podemos exponer que algunos de los perdedores de la contienda siguen experimentando un cuadro de malestar estridente, a causa de las altas expectativas (consumo excesivo de bebidas alcohólicas) interpuestas.  

            En ciertos ejemplos, la soberbia de triunfo anticipada fue tal, que se produjo un coma profundo: Argüelles Victorero. Ni la operación de acompañamiento (restar votos a los demás), a cargo de Sergio Estrada-Cajigal, contribuyó a doblegar al jurisconsulto Urióstegui Salgado, quien será el próximo edil de la capital. 

            El extremo de la ingesta de etil (altivez adelantada) culmina en la muerte por depresión respiratoria (rechazo total del electorado). ¿Quién se encuentra en esta parte? Enlistemos: 

 

1.    Todos los candidatos de “Morelos Progresa”. Se logró conservar el registro; no obstante, a nivel individual, recibieron una aversión unánime: nadie los quiere ver. El pretérito de abuso (y robo) dentro de la 53 Legislatura los decapitó.  

 

2.    La posible extinción del PRD. ¡Golpe durísimo a la política tribal! Una izquierda pulverizada desde la época graquista. El votante sólo dio la estocada (causando una herida que no se va a cauterizar).  

 

3.    Alejandra Flores Espinoza. Pretendía renovar su presencia en el parlamento 55, a través de las mismas siglas: Morena. ¡Ternurita! Todo se paga (muy temprano). El engreimiento y la falta de preparación son sincrónicos; es decir, plantean un tiempo reversible.  

 

4.    Keila Cele Figueroa (morenista incidental). Una más que queda acorralada por el invento de Robespierre (en la Revolución Francesa). Nadie es profeta en su tierra. Zacatepec le mostró su animadversión genuina. Patadas de ahogada: manifestarse ante el OPLE.  

 

5.    Morena. Perdió la mayoría calificada a nivel nacional. Esto le resta fuerza al jefe del Ejecutivo federal. La oposición pondrá obstáculos al por mayor, con tal de frenar iniciativas y otros caprichos del CACICAZGO. 

 

Las lecturas o el análisis pueblan el mundo de las conjeturas. Todo es simple: es cosa de asimilar el orbe post-comicial, para dilucidar lo que viene: impugnaciones, vericuetos legaloides, posturas violentas, defensas a ultranza de escaños… Un sinfín de trabajo en la dehesa de los tribunales especializados.  

Este escenario diminuto nos clarifica que no hay, ni habrá, madurez en las lizas de este tipo (en Morelos y el resto del país). ¿No comprenden que la democracia es dialéctica?: se pierde y gana, mas nada es perpetuo.  

El oprobio y la sed de poder los ciega. Son vivos-muertos. Esqueletos sumergidos en el lodo cenagoso de la imprudencia.  

Impugnar es un insulto para la ciudadanía, puesto que es una forma de poner en tela de juicio su decisión soberana. Al tiempo… 

 

ZALEMAS 

            ¿Alguien vende pays? ¿O baturros en la Sierra de Cazorla?