Sobre el vacío
En opinión de Carlos Morales Cuevas
La aldaba canta al otro lado de la puerta;
un casimir,
sobre el vacío,
espera.
Agua bendita enfebreciendo la mezcalina,
juguete del destino,
sombra del dolor.
Con humeantes brasas en las pupilas
y la electricidad viajando por sus venas,
los muertos
atisban nuestro mundo.
Nochecita de San Pedro,
reflejo en las cenizas,
cantimplora fumando albor.
Macilento ejército de nibelungos
desgranando, fugaces,
una bermeja granada.
Psiturismo ahogándose en la obscuridad,
estupor del sueño añejo.
Sobre el vacío,
la polífona aldaba desfallece.
Un casimir espera;
penumbra, conticinio, nada.