Observador político - Luz y sombras, entre los hermanos Adame Alemán

El discurso de Juan Pablo Adame Alemán en el Senado, tras convertirse en senador por un día, fue sin duda un momento conmovedor y emotivo; su lucha personal contra el cáncer, evidenciada por su aspecto físico, tocó los corazones de todos los presentes y logró unificar a todas las expresiones político-partidistas en la Cámara alta.

LUZ EN EL SENADO.- Es innegable que la causa que Juan Pablo defendió con tanta pasión, la atención y el apoyo a las personas que padecen cáncer, es sumamente loable; sobre todo porque el cáncer es una enfermedad devastadora que afecta a muchas familias en todo el país, y es un problema de salud pública que merece la atención y el apoyo del gobierno y la sociedad en su conjunto.

La iniciativa que presentó para otorgar apoyo económico a las familias con pacientes de cáncer y la solicitud de más recursos para la atención de esta enfermedad son pasos en la dirección correcta; es esencial garantizar que las personas que enfrentan el cáncer no solo reciban el tratamiento adecuado, sino que también cuenten con el apoyo necesario para sobrellevar los costos y las dificultades emocionales que conlleva.

La aprobación unánime del punto de acuerdo presentado por Juan Pablo Adame es un claro indicador de que esta es una causa que une a los legisladores de diferentes partidos políticos, esto demuestra que, cuando se trata de cuestiones de salud pública y bienestar social, la política partidista puede dejar de lado sus diferencias en favor del bienestar de la ciudadanía.

Sin embargo, es importante señalar que, si bien es un logro positivo que esta iniciativa haya sido aprobada, también es un recordatorio de que la atención a la salud y el acceso a tratamientos médicos adecuados no deberían depender de casos excepcionales como el de Juan Pablo Adame, es decir, deberían ser derechos fundamentales garantizados para todos los ciudadanos desde el principio y en ese sentido, es parte de su argumentación ante sus iguales.

La intervención de Juan Pablo Adame en el Senado fue un llamado a la solidaridad y la acción en favor de las personas afectadas por el cáncer; empero, también pone de relieve la necesidad de un sistema de salud más sólido y equitativo en México, donde el acceso a la atención médica y los recursos necesarios no dependa de gestos heroicos individuales, sino que sea un derecho para todos los ciudadanos.

LA SOMBRA.- Un claro ejemplo de la falta de responsabilidad y ética que a menudo prevalece entre algunos individuos que ocupan posiciones de poder y privilegio es el de Armando, hijo del exgobernador Marco Antonio Adame Castillo, quien parece haber utilizado su influencia y conexiones para atraer inversiones de empresas constructoras en Morelos, prometiendo obras que nunca se materializaron.

Este tipo de comportamiento no solo es una traición a la confianza de estas empresas, sino también un reflejo de la corrupción sistémica que ha prevalecido en la política y la gestión pública durante años, aprovechando sus relaciones que sigue teniendo en las altas esferas del poder Ejecutivo y quien tiene que deslindarse para evitar verse afectado sus contactos ante estas acciones a todas luces irregulares.

La falta de transparencia en la desaparición de Armando durante cinco días, después de "andar de farra", es alarmante y sugiere que podría estar tratando de evadir sus responsabilidades y escapar de las consecuencias de sus acciones jurídicas y legales; lo que se considera como inaceptable, especialmente considerando que él es hijo de un exgobernador y, por lo tanto, debería ser consciente de la importancia de la integridad y la rendición de cuentas en la vida pública.

Es alentador ver que las empresas afectadas están dispuestas a tomar medidas legales para recuperar los recursos que Armando les prometió; esta es una señal de que la impunidad y el abuso de poder pueden enfrentar desafíos cuando las partes afectadas están decididas a buscar justicia.

La denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado es un paso necesario para garantizar que Armando rinda cuentas por sus acciones y se le obligue a cumplir con sus compromisos; empero, esta historia también pone de relieve la necesidad de una mayor vigilancia y transparencia en la gestión de recursos públicos y en la relación entre la política y los negocios, por lo que la corrupción y los abusos de poder socavan la confianza de la ciudadanía en sus líderes y en las instituciones gubernamentales.

SE LE HIZO BOLAS EL ENGRUDO A MORENA.- La "democracia" de Morena fue una farsa predecible, es decir, resulta innegable que el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador tiene un peso abrumador en la toma de decisiones en Morena, lo que socava la promesa de un partido abierto y democrático. Pero más que eso, es indiscutible la falta de competencia real dentro del partido plantea preguntas incómodas sobre la verdadera naturaleza de la democracia interna en Morena.

Incluso, la reciente designación de Claudia Sheinbaum como candidata presidencial y el caso de Xóchitl Gálvez en el pasado, revelan un patrón alarmante de lo que algunos llaman "imposición democrática".

El hecho de que los partidos de la oposición también hayan recurrido a prácticas similares, como la elección de Xóchitl Gálvez, no justifica la falta de transparencia y participación en Morena; de ahí que se evidencia un partido que prometió un cambio radical en la política mexicana sin lograrlo.

Además, la referencia a la elección del candidato en Morelos señala un problema sistémico en el partido, por lo que el hecho de que grandes cantidades de dinero fluyan en el proceso de selección, ya sea de recursos públicos o privados de dudosa procedencia, sugiere que la política sigue siendo un juego de intereses particulares.

El resultado final es que la representatividad y la voz de las bases de Morena parecen desestimarse en favor de las decisiones tomadas desde Palacio Nacional;  enfoque que socava la diversidad de opiniones dentro del partido y perpetúa la percepción de que Morena es una marca registrada, donde los líderes locales tienen poca influencia real.

Por tanto, la "democracia" en Morena está lejos de ser lo que se prometió en un principio; los casos de Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez son solo ejemplos de una tendencia preocupante hacia la concentración de poder y la falta de participación genuina en un partido que una vez ofreció esperanzas de cambio real en la política mexicana y que ocurrirá la misma historia en Morelos con sus corcholatitas.

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