Observador político - ¿Dónde está la dirigencia del PRD?
En opinión de Gerardo Suárez Dorantes
A pesar de ser los dos principales responsables de la extinción del PRD en Morelos, al no alcanzar el tres por ciento de la votación total y con ello la cancelación de su registro, son sin lugar a dudas Cristina Balderas Aragón y Matías Quiroz Medina, presidenta y secretario general, respectivamente del Comité Directivo Estatal, aún, de lo que queda del sol azteca.
EL JUDAS DEL PRD.- Además de la ambición política por el dinero, las posiciones políticas y el control del partido que fue lo que provocó una confrontación antes,
durante y después de las elecciones Matías Quiroz Medina, considerado por muchos militantes y simpatizantes “El Judas del PRD”, intentó a toda costa la candidatura a la diputación local plurinominal luego de considerarla como un espacio de familia, debido a que actualmente su esposa Rosalinda Rodríguez Tinoco, es quien tiene en su poder esa curul que no querían dejarla ir.
Hay que decir que uno de los personajes que más se benefició a costa del sol azteca fue precisamente Matías Quiroz Medina, quien de secretario de gobierno
durante la administración del tabasqueño Graco Ramírez Garrido Abreu, decidió brincarle cuatro meses antes de las elecciones del 2018 a la dirigencia estatal del PRD-Morelos, luego de haber hecho un enroque con Hortencia Figueroa Peralta, quien en ese momento fungía presidenta del sol azteca, era diputada local y tenía en la bolsa la candidata al senado de la república… casi nada.
Empero, la fuerza del médico Matías Quiroz se dio por el respaldo que siempre
tuvo de su patrón, su amigo y mentor Graco Luis Ramírez, por lo tanto, su salida del gabinete se debió a que buscaba convertirse en diputado por la vía plurinominal que ya le habían ofrecido. Lo triste para él fue que se requería la candidatura de una mujer para poder cumplir con la cuota de género que en ese momento se exigía, por lo que sin pensarlo mucho, decidió imponer a su señora esposa Rosalinda Rodríguez Tinoco -actual legisladora- en la primera posición de la lista plurinominal.
A partir de ahí, el originario y ex edil de Tlaltizapan fue quien prácticamente se sacó la lotería porque desde ese momento, empezó “a nadar de a muertito”, derivado de los conflictos políticos y personales que tenía con quien fuera candidato a la gubernatura de Morelos en el 2018, Rodrigo Gayoso, a quien le puso zancadillas para frenarlo en sus aspiraciones, algo que no costo mucho esfuerzo porque la ola obradorista, así como Morena y Cuauhtémoc Blanco, le ayudaron a Matías Quiroz a quitarse de enfrente al hijastro del ex gobernador Ramírez.
LOS DESAPARECIDOS.- Han transcurrido ya 18 días después de la dolorosa
derrota que sufrió el PRD y con ello su desaparición y hasta el momento, ni Cristina Balderas Aragón ni Matías Quiroz Medina, se han dignado en salir a los medios a informar que fue lo que pasó, a pedirle perdón a la militancia y agradecerles públicamente a los miles de morelenses que pese a su negro historia decidieron seguirles dando su confianza.
Tal parece que se los tragó la tierra. Es más, parecen avestruces con la cabeza agachada echándose la culpa unos a otros, sin asumir su responsabilidad, evidenciando que nadie tiene la dignidad de informar la catástrofe ocurrida en la
última elección que provocó que en breve, sean desaparecidos del mapa
electoral como dirigencia y si acaso, del Comité Ejecutivo Nacional les estará enviando en breve un delegado especial para atender las necesidades de lo poco que queda del sol azteca.
En tanto que la esposa de Matías Quiroz Medina, Rosalinda Rodríguez Tinoco, sigue cobrando sus más de 100 mil pesos mensuales como diputada, sin que jamás durante los tres años del periodo legislativo, logró comportarse como la oposición que son. Es más, para muchos fue comparsa del actual régimen, votando y aceptando todo lo que les decían desde los pasillos de palacio de gobierno. Y esa fue durante tres años la representación personal y familiar de Matías Quiroz quien al mismo tiempo, tras dejar la dirigencia estatal se cobijó en la secretaría, desde donde hizo el trabajo sucio, al no tener representantes en todos los municipios y distritos, grillando a los candidatos a los cargos de elección popular. Es decir, El Judas del PRD fue el médico Matías Quiroz Medina, a quien por cierto no le costó nada de esfuerzo con una dirigente tan débil y pese a sus años dentro del partido, parecía novata por su forma de ser y comportarse en plena campaña como sucedió con Cristina Balderas Aragón.
UN SEVERO GOLPE A LA ECONOMÍA POPULAR.- Para nadie es un secreto que el coronavirus provocó severos efectos devastadores en las economías de las familias, más ahora que apenas se empieza a sentir directamente el daño provocado por la pandemia con los incrementos a los productos de la canasta básica y que amenazan con incrementarse en perjuicio de los más vulnerables. Y es que los impactos que se vienen serán letales, y más cuando se sabe que el transporte colectivo en Morelos está siendo analizado para buscar las alternativas de un aumento al pasaje que se pudiera dar en el transcurso del año, muy a pesar de la crisis económica de las familias que prácticamente lo han perdido todo.
En efecto, los permisionarios y chóferes han perdido mucho por la pandemia, igual que todos los sectores por lo que sería inhumano que en este momento, se pongan a buscar alternativas que les beneficien en perjuicio de los grupos civiles más débiles, en razón de que se estaría atentando aún más contra su precaria situación financiera. De aprobarse un aumento al pasaje en Morelos, sería un golpe demoledor, ofensivo y directo a los bolsillos de quienes ya no tienen casi nada. Sí en verdad se les quiere ayudar a los transportistas, puede ser con incentivos fiscales, apoyos para viáticos, créditos, entre otros que les otorguen los gobiernos federal y estatal pero no a costa de seguirse apretando el cinturón los más necesitados.
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