Inclusión Educativa en la UAEM - La condición bilingüe de la Lengua Escrita (IV): UAEM
En opinión de Eliseo Guajardo
La Lengua en abstracto comentaba con Laura Quintanilla, una colega regia de la Universidad Nacional Educación a Distancia (UNED) de España, es la que se emplea para el pensamiento. Es la imagen acústica de la lengua. Y se emplea en el pensamiento discursivo, del que nos hablaba Henri Wallon, en “Del acto al pensamiento”. Principalmente para el pensamiento categorial que se inicia en el niño. Para pensar, también empleamos imágenes visuales, cenestésicas y kinestésicas. Utilizamos todo, lengua e imágenes es el lenguaje interior del que habla Vygotski. Porque el lenguaje, puede ser verbal y no verbal. Sin olvidar que la Lengua en abstracto también es la formalización del idioma, es su gramática. La estudian los lingüistas, y la recogen del corpus de los hablantes, que son los que le dan vigencia, las reglas provienen de los hablantes, no de los lingüistas. Como nos sugiere, Lídice Ramos (Profesora de la Facultad de Filosofía y letras de la UANL, prima mía). Continuando, el habla es la parte abierta del sistema de la lengua, es la ejecución individual de la palabra y es infinita en su intención y contenido. Mientras que la formalidad de la lengua es social y finita y se reduce a las normas válidas para su comprensión, pero evoluciona a partir del habla de las individualidades de las personas de una comunidad. El habla es abierta y la lengua tiende a ser cerrada, sistémica, y conservadora.
Los fonemas además de ser la parte más pequeña e indivisible de la palabra, es la imagen acústica, según el clásico Trubetskoy, y no el punto de articulación en el habla, más pequeña, porque esta última, es la fonética de la palabra. Los Sordos no tienen la imagen acústica de su Lengua de Señas; obviamente, tienen imágenes visuales de las señas con las que piensan. Y cuando dominan el español, pueden tener las imágenes visuales de los fonemas de la Lengua Española. Que es como cuando una persona bilingüe o políglota, piensa en otro de los idiomas que domina. O lee en otra lengua y no está traduciendo, sino entendiendo directamente de la otra lengua no materna.
Los fonemas son los sonidos pensados de la lengua, porque los sonidos articulados del habla son su fonética, su acústica. Hay una gran diferencia entre los sonidos de la lengua y los sonidos físicos de las cosas. Incluso, se procesan en localizaciones diferentes en la corteza cerebral. Hay unas sutilezas en los sonidos del habla que son difíciles de percibir si no se domina la lengua. Es lo que ocurre con las lenguas extranjeras, por ejemplo. Y en realidad muchos sonidos no son percibidos físicamente. Se deducen por la posición que ocupan los fonemas en la lengua. De ahí la fluidez con las que pueden ser emitidos y percibidos por el receptor auditivo. Aquí la semántica del mensaje cumple una función también. Esto es, la comprensión está teniendo una participación muy significativa. La percepción se ha descubierto desde hace tiempo es una actividad, no se reduce a una mera sensibilidad de estímulos. Se puede decir que es el sujeto el que elige el estímulo que está buscando o necesitando como una verificación del sentido en el sonido del entorno. Logra discriminar los sonidos de la lengua del resto de los sonidos que los inhibe por innecesarios y hasta ruido distractor. Es como cuando se habla en un antro, lleno de ruido, se logra inhibir el ruido y diferenciar el habla. Se realiza a través de una actividad perceptual.
Ocurre lo mismo con la Lengua escrita en la lectura, no se van percibiendo todas y cada una de las letras. Se distinguen las que resultan significativas para el sentido del texto. Para empezar, se espera un significado en función al soporte material del texto. Si se trata de un cuento, una revista, un periódico, etcétera. Ya se está leyendo el probable contenido. A eso se le denomina anticipación. Entrado al cuerpo del texto, tampoco se descifra letra por letra. El ojo va brincando en el campo de búsqueda de la letra que da el significado estratégico del texto. A esto se le denomina predicción.
Ni oímos todo, lo deducimos con imagen acústica, ni desciframos todo, lo deducimos. Dice el dicho “el sordo no oye, pero compone”. Efectivamente, casi todo es composición semántica y sintáctica, en el habla y en el texto. Por ello, el Sordo podría anticipar y predecir un texto en español, no requiere del oído, plenamente. Su imagen acústica sería imagen visual del texto escrito.
Termina en la próxima entrega (V).