DESARROLLO REGIONAL

En opinión de Juan Salgado Brito

DESARROLLO REGIONAL

El desarrollo regional se define como “un proceso de cambio social sostenido que tiene como finalidad última el progreso permanente de la región, el territorio, la localidad, la comunidad y de cada individuo residente en ella. Además de estar vinculado estrechamente a un proceso de crecimiento económico”. El desarrollo regional requiere de las Autoridades pleno conocimiento de las regiones, de la idiosincrasia de su gente, del potencial de los recursos naturales disponibles así como de la infraestructura con que cuenta, sus antecedentes históricos y las circunstancias sociales, económicas y culturales de todos los municipios de la zona; indiscutiblemente que para impulsar un desarrollo regional integral se deben considerar la planeación urbana, los servicios de agua, drenaje y alcantarillado, vivienda, destino de desechos sólidos, infraestructura educativa y para la salud, fuentes de trabajo, seguridad, industria, comercio y turismo, entre otros.

En Morelos podríamos hablar de zonas como la región de Cuernavaca y su área metropolitana, la región norte (los altos), la región oriente partiendo de Cuautla, la región sur como Jojutla y municipios conurbados y la región poniente del Estado. Con gran diversidad en sus ritmos de crecimiento todas las regiones representan grandes oportunidades de desarrollo, más aún si se sabe conjugar la inversión pública, social y privada tomando en cuenta la vocación, los tipos de propiedad en la tenencia de la tierra para garantizar certidumbre, confianza y seguridad en todas las inversiones, sin duda que para poder impulsar un desarrollo regional amplio, incluyente y con sentido social, se requiere de liderazgo, político y de gobierno en los tres órdenes, especialmente en el ámbito Estatal y Municipal, se requiere también una decidida participación del sector empresarial y seguramente con visión de  horizonte, haciendo acopio de voluntad política, experiencia y capacidad, se puede arribar a un serio plan de desarrollo regional, con proyectos técnicos, esquemas financieros y diagnósticos de impacto social, no faltará quien apoye los programas innovadores para el progreso de Morelos.

Quizá podríamos hablar de más regiones y de otros rubros para el desarrollo social, el crecimiento económico, el combate a la pobreza, a la marginación, la desigualdad y para el fortalecimiento institucional; sin menoscabo de reconocer que hacen falta obras de gran calado y programas sociales más amplios e incluyentes, podemos resumir que son inaplazables políticas públicas transformadoras que apunten a mejorar la justicia, la seguridad y el bienestar.