Breves de Abogados y Políticos - El otro ex gobernador

En opinión de Alejandro Corona Markina

Breves de Abogados y Políticos - El otro ex gobernador

Aunque en las últimas semanas, toda la atención política ha estado centrada en los presuntos delitos cometidos por el ex gobernador tepiteño, Cuauhtémoc Banco Bravo, su predecesor tabasqueño, Luis Graco Ramírez Garrido Abreu, no vende piñas -ni plátano tabasco-, pues los expedientes que hablan de las corruptelas cometidas en su gobierno, por fin han comenzado a judicializarse, después de que su protector e incondicional, el fiscal Uriel Carmona Gándara, fuera echado de la Fiscalía General.

Así, el pasado viernes, en los juzgados penales de Atlacholoaya, se celebró una audiencia en donde la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, logró la vinculación a proceso de seis ex colaboradores del nefasto Graco Ramírez, a quienes se atribuye la realización de manera irregular e indebida, del pago de supuestos materiales de papelería a favor de la empresa Serveis Akram S.A. de C.V., acto que junto con otros, significó la distracción de 81 millones 450 mil 320 pesos, toda vez que no existe evidencia de que los insumos adquiridos hayan sido entregados al almacén general, ni documentación que acredite su existencia. O sea que simularon una operación mercantil y se quedaron con los recursos.

En la transa mencionada, está involucrado el exsecretario de Hacienda, Jorge “N” y el ex tesorero Armando “N”, además de otro Jorge "N", exsubsecretario de Presupuesto de la misma Secretaría de Hacienda; Gerardo “N”; Salvador “N” y Carlos “N”, quienes, en distintos momentos estuvieron a cargo de la Dirección General de Presupuesto y Gasto Público.

Así, el pasado viernes un juez de control encontró elementos suficientes en las 229 solicitudes de pago a favor de la citada empresa, de lo cual son presuntamente responsables Armando “N” y Carlos “N”, quienes en distintos momentos fueron tesoreros del gobierno y tenían pleno conocimiento de las operaciones fraudulentas.

No obstante, esto es apenas una pequeña muestra de las corruptelas cometidas por la administración de Graco Ramírez Garrido, algunas de las cuales quedarán en la impunidad, pues han prescrito los delitos, sobre todo cuando se trata de omisiones en el cumplimiento de los procedimientos normativos. Otras fueron “limpiadas en la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización, donde las observaciones resarcitorias fueron convertidas en observaciones administrativas, cerrando convenencieramente los expedientes que estaban cargados de pruebas de la distracción y robo de recursos provenientes de empréstitos autorizados por la legislatura que encabezó la entonces diputada local Lucy Meza, mismos que los ciudadanos de la entidad seguimos pagando.

Los morelenses tuvimos una docena trágica en los sexenios de Graco y Cuauhtémoc, pues ambos se mostraron como lo que son: dos individuos sin escrúpulos, ni principios morales, ambiciosos, nefastos y corruptos, que saquearon las arcas de la sufrida entidad zapatista, a la que no le tuvieron la menor consideración a la hora de saquearla, pues estos tipos no tienen arraigo ni amor por esta tierra.

Así, el fin de semana avanzó la carpeta de investigación FECC/048/2019, que incluye datos de prueba relativos a documentales y testimoniales sobre el pago de 21 millones 735 mil pesos, por la compra de papelería de forma irregular, pero no existió un contrato que validara la transacción, ni evidencia de que los bienes existieron ni que se entregaron en el almacén general, además de que también se responsabiliza a los mencionados en el pago de 20 millones de pesos a una empresa por “supuestos” servicios de capacitación y la distracción de recursos que estaban destinados al otorgamiento de becas para hijos de trabajadores del Poder Ejecutivo, así como al pago de estímulos por prima de antigüedad, entre otros rubros que en total significan 81 millones 450 mil 320 pesos de afectación. 

Es evidente que al término de la gestión 2012-2018, las corruptelas cometidas en el gobierno de Graco Ramírez Garrido Abreu estaban por todos lados, pero el tabasqueño se blindó colocando a Uriel Carmona Gándara en la Fiscalía General y éste “compró” a los diputados de dos legislaturas consecutivas para evitar ser removido, en tanto que quien lo sucedió en la gubernatura se dedicó a la fiesta permanente, al latrocinio y frivolidad, por lo que los morelenses quedaron sumidos en la peor de las desgracias.

Afortunadamente, a Graco Ramírez no se le hizo que Lucy Meza fuera gobernadora, ni Cuauhtémoc Blanco pudo colocar a ninguno (a) de sus incondicionales en la gubernatura morelense. Así, el gobierno de Margarita González Sarabia se ha distinguido a nivel nacional, como uno de los mejores y poco a poco se empieza a revertir el daño ocasionado por los mencionados.

Por ello, sin venganzas políticas pero tampoco encubrimientos, podemos ver la actuación de la actual Fiscalía General, misma que sin distingo llama a cuentas a los funcionarios corrutos de los fuereños Graco Ramírez y Cuauhtémoc Blanco; no dudemos que pronto ellos mismos estén en el banquillo de los acusados.