¡Viva México! Rodrigo Arredondo dio un grito histórico
Con fuerte lluvia y más del 10 mil cuautlenses al unísono
Al concluir el protocolo del Tradicional Grito de Independencia, el Presidente de Cuautla, Rodrigo Arredondo y su esposa, Araceli García Garnica, enmedio de la intensidad de la lluvia que azotó al estado, salió del Palacio Municipal para unirse a los diez mil cuautlenses que se dieron cita para hacer vibrar el recién inaugurado Zócalo de la ciudad, con asombro los asistentes corearon el ¡Viva México!, ¡Viva la Unidad del Estado! y ¡ Viva la Cuarta Transformación! esta es la primera vez que un alcalde cuautlense decide empaparse para convivir con los asistentes y ser recibido en un coro de ¡Presidente!, ¡Presidente!, ¡Presidente!.
En Cuautla no sólo se vibró la plancha del Zócalo en un único ¡Viva México! se sintió el amor a la patria en cada uno de los corazones, puesto que caer la lluvia la ciudadanía estaba a la espectativa y coreaba desde la parte baja del Palacio Municipal, donde se resguardaba, el "Cielito Lindo", hasta que vió salir al palco presidencial al alcalde, Rodrigo Arredondo, que quien con el orgullo de ser cuautlense, morelense y mexicano enlisto a los héroes que le dieron libertad e identidad al país.
Al ritmo de Los Giles y de Factor Cumbia, las mujeres de trenza y los hombres de sombrero bailaron y corearon su canciones, las familias no dudaron en disfrutar de mis antojitos mexicanos que, el Gobierno de Cuautla, prepararon para vivir una noche Mexicana inolvidable.
El Zócalo de Cuautla vibró después de cinco años de haber quedado paralizado por la contingencia sanitaria y por la falta de la remodelación de la Casa Real, que esté viernes lució a su máximo esplendor al ser el hogar de cada cuautlense.
El cielo de Cuautla retumbó y es que la lluvia no fue un obstáculo para que los diez mil asistentes disfrutaran de un espectáculo de pirotecnia que iluminó el cielo y los ojos de los cuautlenses.
Cada milímetro de agua que toco el cuerpo del Presidente de Cuautla, Rodrigo Arredondo y de su esposa, Araceli García Garnica, les recordó que es un privilegio nacer en una ciudad histórica y llena de bondades que hace único a cada cuautlense, y es justo ese amor a su tierra que los hace trabajar para el bienestar de cada familia.