Se discutió sobre necesidad de reducir contaminación plástica

Se discutió sobre necesidad de reducir contaminación plástica

En un esfuerzo por fomentar la conciencia y la acción ambiental, el Centro de Investigación Interdisciplinar para el Desarrollo Universitario (Ciidu), de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), realizó las 7ª Jornadas Académicas sobre el Día Mundial del Medio Ambiente. Aproximaciones Multi e Interdisciplinarias, forjando un futuro para poner fin a la contaminación por plásticos.

 

La primera la conferencia magistral tuvo por tema Contaminación plástica: sector salud-hospitales, a cargo de Mabeth Burgos Hernández, profesora investigadora de la Licenciatura en Ecología de la Universidad Estatal de Sonora (UES).

 

Ella sostuvo que “el sector salud consume alrededor de 15 millones de toneladas de plásticos al año. Además, los establecimientos sanitarios generan plásticos de uso no médico como platos, botellas de bebidas y artículos de tocador desechables. En la mayoría de los casos los plásticos no médicos superan a los productos sanitarios”.

 

Burgos Hernández expresó que “entre el 35 y el 40 por ciento de todos los productos plásticos que se fabrican en el mundo son artículos de un solo uso, y en el sector de la salud este porcentaje es aún más alto. Los empaques casi siempre son desechables y pueden representar hasta el 25 por ciento de los residuos plásticos de un hospital. La percepción de que los plásticos de un solo uso son más seguros carece de pruebas que lo corroboren. Usualmente se utilizan porque son más convenientes”, explicó.

 

Entre las soluciones que existen a esta problemática, la investigadora expuso que países como Estados Unidos y Canadá, más los de la Unión Europea, han implementado un cambio en cuanto a prevenir el uso de estos materiales como lo más importante, sustituyendo con otros menos tóxicos o que no tengan plástico, reducir su consumo, reutilizar antes que reciclar porque en el proceso generan otros contaminantes, recuperar, tratar y reponer, en una economía circular que se espera migrar en el futuro en todo el mundo.

 

Finalmente, comentó que a través del trabajo de una organización no gubernamental financiada por la ONU llamada Salud sin Daño, que ya ha trabajado en México y cuenta con oficinas en todos los continentes, han hecho importantes cambios desde 1991 para convertir a los hospitales en lugares donde se dejen de utilizar plásticos tóxicos o al menos se reduzca su uso.

 

El trabajo realizado en Sonora, por la investigadora y su equipo, dio como resultado un programa piloto para la eliminación del mercurio en los hospitales de esa entidad, por ejemplo, sustituyendo los termómetros por unos digitales, con una metodología que puede utilizarse para cada insumo contaminante.

 

Para la ceremonia de inauguración de las 7ª Jornadas Académicas sobre el Día Mundial del Medio Ambiente se contó con la presencia de Juan Manuel Rivas González, coordinador general de Planeación y Desarrollo Sustentable, en representación de la rectora Viridiana Aydeé León Hernández; Cony Brunhilde Saenger Pedrero, directora del Ciidu; y Gregorio Bahena Delgado, director de la Escuela de Estudios Superiores (EES) de Xalostoc.

 

Las jornadas se llevaron a cabo del 4 al 6 de junio en donde se presentaron diversas conferencias, paneles de discusión y actividades presenciales con la participación activa de estudiantes, docentes, investigadores y la comunidad en general. A través del canal: https://www.youtube.com/@CIIDUUAEM las personas interesadas pueden consultar algunas de ellas.

 

 La contaminación plástica es un problema grave que afecta a nuestro planeta y a nuestra sociedad. La producción y el uso excesivo de plásticos han generado una gran cantidad de residuos que terminan en nuestros océanos, ríos y suelos, causando daños irreparables al medio ambiente y a la vida silvestre. Es fundamental reducir la contaminación plástica para proteger nuestro planeta y garantizar un futuro sostenible.

 

En México, se han tomado medidas importantes para reducir la contaminación plástica en los últimos años. Una de las acciones más destacadas es la aprobación de la Ley para la Prevención y Gestión Integral de Residuos, que establece metas y acciones concretas para reducir la generación de residuos plásticos y mejorar su gestión. Además, se han implementado programas y campañas para promover el uso responsable de plásticos y fomentar la cultura del reciclaje.

 

El gobierno mexicano también ha lanzado iniciativas para reducir el uso de plásticos de un solo uso, como bolsas y popotes. Algunas ciudades y estados han prohibido el uso de estos productos o han implementado impuestos para desincentivar su uso. Además, se han establecido programas de reciclaje y compostaje para reducir la cantidad de residuos plásticos que terminan en los vertederos y en el medio ambiente.

 

La sociedad civil también ha jugado un papel importante en la lucha contra la contaminación plástica en México. Organizaciones no gubernamentales y grupos de activistas han lanzado campañas y proyectos para concienciar a la población sobre el problema de la contaminación plástica y promover cambios en los hábitos de consumo y gestión de residuos.

 

En los últimos años, se han realizado importantes avances en la investigación y desarrollo de tecnologías para reducir la contaminación plástica. Se han desarrollado nuevos materiales biodegradables y se han implementado sistemas de reciclaje avanzados que permiten recuperar y reutilizar los plásticos de manera más eficiente.

 

La reducción de la contaminación plástica es un desafío que requiere la colaboración y el compromiso de todos los sectores de la sociedad. Es fundamental que los gobiernos, las empresas y los ciudadanos trabajen juntos para reducir la generación de residuos plásticos y mejorar su gestión. Solo a través de un esfuerzo conjunto podemos proteger nuestro planeta y garantizar un futuro sostenible.

 

En México, se estima que se generan alrededor de 8 millones de toneladas de residuos plásticos al año, de los cuales solo se recicla alrededor del 9%. Es fundamental aumentar la tasa de reciclaje y reducir la generación de residuos plásticos para proteger el medio ambiente y garantizar un futuro sostenible para las generaciones futuras.