Se desbordan fervor y multitudes por La Candelaria
En lugares como Tlayacapan o Tetela del Volcán, sin sana distancia
La celebración de La Candelaria provocó el desbordamiento de cientos de ciudadanos que sin guardar la sana distancia y a pesar de que se ha pedido guardarse en casa, salieron a bendecir a sus "Niños Dios". En Tetela del Volcán, el párroco subido en una camioneta bendecía las imágenes del niño.
En Tlayacapan, en el Convento de San Agustín, era larga la fila de feligreses católicos que buscaban ingresar al templo para bendecir sus imágenes. Tampoco se guardó la sana distancia, a pesar del semáforo epidemiológico rojo.