Frente de Pueblos insistirá en que FGR atraiga el caso Samir
Cuautla, Mor.- La vinculación a proceso del fiscal General del Estado (FGE) Uriel N, intensificó las preocupaciones del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua Morelos, Puebla, Tlaxcala (FPDTAMPT) respecto a posibles irregularidades en la investigación del asesinato de Samir Flores Soberanes, ocurrido el 20 de febrero de 2019. "El arresto del fiscal, aunque por otro caso, evidencia posibles fallos en la gestión de la Fiscalía, sobre todo cuando consideramos la falta de avances significativos en el caso Samir", añadió.
Ante la lentitud del proceso, el colectivo inició una petición que ya cuenta con 331 firmas, buscando alcanzar 500 para ser escuchados y exigir una audiencia para que el caso sea atraído por la justicia federal, específicamente por la Fiscalía Especial en Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión, afirmó Juan Carlos Flores Solís, representante jurídico del FPDTAMPT. Además, se presentan acusaciones sobre el fiscal y el gobernador de Morelos en relación con el crimen organizado.
Expresó que Samir Flores Soberanes, fue defensor del territorio y comunicador de la radio comunitaria Amiltzinko, en Temoac, luchó durante siete años contra el megaproyecto energético Proyecto Integral Morelos (PIN). A pesar de las promesas hechas por el presidente Andrés Manuel López Obrador en marzo de 2023 de atraer el caso a la Fiscalía General de la República, no hay cambios; con una audiencia programada para el 11 de agosto de 2023 sobre el presunto homicida de Samir, el colectivo insiste en la urgencia de transferir el caso a la justicia federal.
Miembros del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua Morelos-Puebla-Tlaxcala señalaron que en estos poco más de cuatro años del asesinato, “la fiscalía del estado de Morelos no ha hecho más que hacer uso mercenario del caso para favorecer los intereses del Proyecto Integral Morelos, pretendiendo irse a juicio contra el denominado ‘Temalaco’ sin los elementos suficientes para comprobar sus absurdas afirmaciones y sin tener investigación alguna sobre el motivo de la ejecución de nuestro hermano Samir”.
Refirieron que el activista, además de ser defensor del territorio y promotor de la autonomía de los pueblos originarios, fue un excelente comunicador indígena. Indicaron que antes de su asesinato, ya había recibido diversas amenazas por el teléfono de la radio comunitaria Amiltiznko, que impulsó con jóvenes de su comunidad. Todas eran relacionadas a que se callara la boca en el micrófono o en la calle.
Por eso, enfatizaron, “seguiremos exigiendo que se sepa la verdad sobre quién mandó matar a Samir”.