El precio por la tonelada de azúcar cerró en $19 mil 320
Cuautla, Mor.- Tras concluir el periodo del año de la zafra 2022-2023, finalmente se definió el precio final que cobrarán por cada tonelada de la caña de azúcar entregada al ingenio Central Casasano, propiedad del Grupo Beta San Miguel, notificó Miguel Ángel Barranco García, presidente de la Unión Local de Productores de Caña (ULPCA). Sostuvo que el precio final será de 19 mil 320 pesos por tonelada, lo que es un record para los cañicultores de la zona de influencia del ingenio “La Abeja”, como se le conocía antes.
Expresó que el precio final para el periodo 2022 a 2023, quedó en 19 mil 320 pesos con 31 centavos, con un factor de pagos cañero de 11.01258 y con un Kilogramo de Azúcar Refinada Base Estándar (KARBE) de 129.625. Dijo que los acuerdos sobre el precio por toneladas de azúcar y el factor de pagos cañeros ya fueron consensuados con los productores desde que concluyó la temporada de zafra.
Destacó que a principios del año 2023, ante el desacuerdo de los integrantes de la Unión Local de productores de Caña A. C., por la presunta falta de colaboración de las organizaciones cañeras Flor de Caña y la Asociación de Productores de Caña de Azúcar (ANPCA-CNPR) para homologar los sistemas de cultivo, corte y abasto, el Comité de Producción Cañera aprobó la separación de la cosecha que cada organización entrega al Ingenio Casasano de la empresa Beta San Miguel.
Expuso que mediante este mecanismo, los productores de cada organización tendrán el pago de su caña de acuerdo con la producción de sacarosa de su producto, por lo que dependiendo de la calidad de caña que introduzcan al ingenio será el nivel de Kilogramos de Azúcar Recuperable Base Estándar (KARBE) que obtengan, que es el parámetro que utiliza el actual sistema de pago a los productores en el país.
Indicó que las malas prácticas de las otras organizaciones cañeras que se traducen en cañas de bajo nivel de KARBE y deficiencias en la zafra en la que repercute en una merma por la entrega de cañas rezagadas, fue lo que llevo a la ULPC A.C. a exigir la separación de las cosechas.
Barranco García detalló que, con el fin de zafra 2022 – 2023 se cosechó un total de 719 mil 139 toneladas, cuando se estimaban 750 mil, es decir, alrededor de 30 mil menos de lo esperado. Este año se logró un KARBE de 129.625 kilogramos, un kilo menos en comparación con el del año pasado, y, explicó que, estas bajas se debieron a problemas a nivel nacional, así como otros factores externos.
Barranco García aprovechó para asegurar que la próxima zafra también será con cosecha diferenciada, no integrada, como se acostumbraba, esto para marcar la diferencia con las otras organizaciones.