Busca PIC a dos cafres; uno mató a mujer; otro, a vendedor de elotes
Agentes de la Policía de Investigación Criminal de la Fiscalía de Hechos de Tránsito, ya se encuentran tras la pista de dos irresponsables “cafres de la muerte”; uno es el chofer de una pipa de agua que atropelló y aplastó a una mujer en la colonia Estrada Cajigal; el otro manejaba un auto Ford Fiesta, color negro, con el que arrolló y arrastró varios metros a un vendedor de elotes justo cuando empujaba su carrito en la colonia Miraval de esta ciudad.
Respecto al primer trágico hecho, se reportó la tarde de este jueves a los números de emergencia que en la avenida 10 de Abril de la colonia Estrada Cajigal de Cuernavaca, una pipa de agua acababa de atropellar a una mujer y escapó del lugar.
Por lo que al sitio acudieron policías de Vialidad y paramédicos de la Cruz Roja, quienes se percataron de que la señora Silvia Guadalupe, de 59 años de edad, quien tenía las dos piernas aplastadas y destrozadas, así como golpes en la cabeza, de inmediato la auxiliaron y trasladaron a la sala de urgencias de un hospital, donde momentos después dejó de existir, por lo que agentes policiacos ya buscan al “pipero de la muerte”.
El segundo caso se registró ayer a las 00:00 horas, cuando automovilistas reportaron a los números de emergencia que en la calle Cuauhtémoc de la colonia Miraval de esta ciudad, un vendedor de elotes ambulante había sido atropellado.
Por lo que de inmediato acudieron oficiales de Vialidad y paramédicos quienes se percataron de que lamentablemente el hombre, ya no tenía signos vitales, por lo que dieron aviso a la Fiscalía General del Estado.
Posteriormente arribaron los Servicios Periciales y agentes de la Policía de Investigación Criminal para efectuar el levantamiento de cadáver del hombre que se dedicaba a la venta de elotes, quien en vida respondía al nombre de José Juan, de 62 años de edad el cual murió tras ser brutalmente atropellado por el irresponsable conductor de un auto Ford Fiesta color negro placas PZN-3321 de Morelos, el cual quedó abandonado en el lugar, ya que el cafre de la muerte alcanzó a escapar; ya es buscado por la PIC.