Autoridad debió ayudar a Dulce Flores: Frente Nal. de Mujeres
Cuautla, Mor.- “Lo que advertimos como un dicho, era un hecho; reclamar protección para nuestros hijos e hijas no debería exponer nuestras vidas. Jamás vamos a aceptar que un tribunal que no dimensiona su irresponsabilidad en este caso tan doloroso siga poniendo en entredicho nuestra salud mental, ni nos puede seguir vulnerando”, manifestó Claudia Jiménez, representante en Morelos del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria.
“Este caso es muy preciso para exponer el vacío institucional y el enorme desamparo de la ciudadanía para recuperar la paz. Reclamar protección para nuestros hijos no debería exponer nuestras vidas. La violencia vicaria, al contar con auspicio institucional empodera a los agresores, fomenta la corrupción, vulnera la vida de madres e infancias víctimas y destruye familias arruinando el desarrollo y futuro de los niños”, expuso al hablar del caso de Dulce Gabriela Flores González. y lo que tuvo que pasar su familia este año.
El pasado 22 de julio autoridades de Morelos emitieron una ficha de búsqueda para dar con Dulce Gabriela, mujer víctima de violencia vicaria que ese mismo sábado cumplía un año de no ver a sus hijos Fernando, de 8 años de edad, y Santiago, de 12, luego de que su expareja, José “N”, se llevó a ambos niños tras acordar un encuentro para pasar tiempo con ellos. Cinco días después se confirmó su asesinato; el cuerpo de Dulce fue localizado en el Estado de México.
Aunque la causa de muerte fue asfixia mecánica por estrangulación antebraquial, ni la Fiscalía del Estado de México ni la del estado de Morelos (que levantó la denuncia por su desaparición) han dado información sobre el caso.
Cuando Dulce acudió a la Fiscalía Regional Oriente de Morelos para hacer denuncia por sustracción de menores, se le negó la acción argumentando incompetencia legal. En ese momento, Fernando aún se encontraba con vida y buscaba recuperarlo a él y a Santiago.
Dulce llegó a relatar que Fernando fue encontrado en el baño de la casa donde vivía con su padre y su pareja, quienes aseguraron que el niño de 8 años había cometido “suicidio” al encontrarlo con la cabeza dentro de una cubeta con agua. Sin embargo, la madre rechazó esta versión y exigió a las autoridades una investigación, pues sostuvo que Fernando sufría violencia por parte de su padre y de su pareja.
“¿A qué nos orilla la negligencia, la apatía? Para las instituciones solo somos un número más, prejuzgadas por dichos sin comprobar. En cada caso, las leyes y ‘la buena fe’ se adaptan a sus criterios personales con argucias legales sin importarles las vidas involucradas. Este es un caso que terminó convirtiéndose en un crimen social”, señalaron madres que acudieron al funeral de Dulce.
El Frente Nacional contra la Violencia Vicaria realizó una protesta frente al Tribunal Superior de Justicia de Morelos, al saber de la desaparición de Dulce. Ahí se emitió un pronunciamiento para exigir compromiso de las instituciones para articular acciones sobre los riesgos que viven quienes padecen la violencia vicaria.
Advirtieron que la duplicidad de expedientes, prolongar y entorpecer los juicios con “denuncias falsas” es algo que debe detenerse pues “daña irreversiblemente a las víctimas además de causar perjuicios a la salud individual y social de los involucrados, como los hijos.
Pidió a la Fiscalía General del Estado (FGE) que esclarezca el caso y dé con el o los responsables, aunque advirtió que no confían en las autoridades debido a la polémica que envuelve tanto al fiscal Uriel Carmona con el caso Ariadna Fernanda, como a los señalamientos de presunto acoso laboral contra el presidente del TSJ, Jorge Gamboa.
“No confiamos ni en el TSJ ni en la FGE, pero eso no nos impedirá exigir el esclarecimiento del caso, sobre todo porque en medio está otro menor de edad, hijo de Dulce, que podría estar siendo víctima de violencia”, concluyó.