Acecha desnutrición a menores de 5 años
Morelos, con “presencia crónica” de la desnutrición. Con base en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) reciente, la prevalencia de este mal en niños menores de 5 años es de 14.2 por ciento.
La tendencia nacional (similar en la entidad) revela que los infantes con desnutrición crónica tienen una mayor susceptibilidad a las infecciones, retardo en el crecimiento físico y desarrollo cognitivo, menor rendimiento escolar, y cercanía a desarrollar enfermedades crónicas: la diabetes, hipertensión y enfermedad coronaria y, a lo largo del curso de la vida, menor productividad.
Así lo enfatiza también el Instituto Nacional de Salud Pública. Expresa que la anemia y las deficiencias de micronutrientes, conocidas como hambre oculta, tienen "serias repercusiones en el desarrollo cognoscitivo, el crecimiento y la resistencia física” de los menores.
Y agrega que “la nutrición adecuada en las niñas y niños menores de 5 años, en especial durante los primeros mil días de vida, que abarca desde la concepción hasta los dos primeros años, es fundamental para la promoción del crecimiento, salud y el desarrollo óptimo”.
Asimismo, aduce que la anemia “afectaba a 1.2 millones de mujeres embarazadas (34.9%), y a 38.7 millones de mujeres no embarazadas (17.5%), en todo el país”.
La prevalencia nacional de anemia en niñas y niños preescolares era de 32.5%, es decir, casi 4.2 millones en este grupo de edad.
Los más afectados son los “pequeños”: casi la mitad de las niñas y niños de 12 a 23 meses tenían anemia (48.2%) en comparación con el grupo de 4 años (20.6%).
Es importante destacar que según la ENSANUT 2018, la deficiencia de zinc afecta al 18.6 de niños de 1 a 4 años, principalmente en los sectores más pobres (23.4). Este déficit ha sido reconocido como un factor de “riesgo importante” para la morbilidad y mortalidad infantil por diarrea y neumonía, entre otras. En la entidad y la nación, la prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad es de 6.8 para niños en edad preescolar; 15 y de 35.6 en aquellos de edad escolar, lo que aumenta el desarrollo temprano de enfermedades crónicas, que tiene consecuencias negativas en la salud mental de quienes la padecen.