Secreto a Voces - Las revoluciones pacíficas latinoamericanas en alta tensión en 2024 (15)
En opinión de Rafael Alfaro Izarraraz
Pan, petróleo, intentos de invasión, violencia y la reactivación de modelos neoliberales son las divisas que de momento la oligarquía y las elites mundiales han reactivado en la región latinoamericana y el Caribe con el fin de detener el impacto de las revoluciones pacíficas de Venezuela, Bolivia y México, así como los cambios en Brasil y Colombia con los triunfos de Lula y Gustavo Petro, respectivamente. Lo anterior, en el contexto de que se ha iniciado la región un cambio en la correlación de fuerzas entre EU y las corrientes progresistas y de izquierda en esta parte del subcontinente respaldadas por los BRICS.
México por su política exterior hacia EU es un caso particular, hacia el norte de América, pero se incrusta en la lógica de las revoluciones pacíficas latinoamericanas actuales.
Este año habrá elecciones presidenciales en Venezuela, Bolivia, Ecuador y México, naciones en donde se han impulsado revoluciones pacíficas con diferentes resultados en cada uno de ellos. Para 2024 firmes en Venezuela, Bolivia y México, con sus problemas por supuesto relacionado con la lógica particular de las fuerzas, derechistas o conservadoras, que disputan a gobiernos revolucionarios el poder. En Ecuador, la Revolución Ciudadana, tendrá otra oportunidad de regresar a la presidencia. En los otros tres países las fuerzas revolucionarias se mantendrán en el poder.
Latinoamérica y el Caribe, están incrustados en una región en disputa por las potencias mundiales. Los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, más los que se han sumado) tienen una presencia en Latinoamérica y el Caribe, lo que ha permitido que Venezuela y Bolivia se manejen con cierto margen de maniobra ante las presiones de EU. China y en general los BRICS han desplazado a Europa como segunda potencia inversora en la región y casi está a la par con EU. Rusia se ha reposicionado en Cuba y Nicaragua, entre otras naciones.
La incorporación de Brasil (potencia latinoamericana) a los BRICS al que se incorporarán Venezuela y Bolivia, en breve, ha significado un cambio fundamental en la región y ha puesto en tela de juicio la creencia de que Latinoamérica y el Caribe son el patrio trasero de EU. Es en esta coyuntura en la que ocurrirán las elecciones de este año en las naciones ya mencionadas. No puede pasar desapercibido el triunfo del ultraconservador Milei en Argentina y el conflicto entre Guyana y Venezuela que surgió hace unos meses.
Las revoluciones pacíficas se juegan su estancia en el poder ante la derecha latinoamericana apoyada por EU. La ultraderecha ha logrado reactivar un poco de sus fuerzas en la región con el triunfo de Milei en Argentina y el golpe de Estado contra Pedro Castillo, en Perú. Aunque las oligarquías sufrieron una derrota en Brasil con el triunfo y regreso de Lula y el PT al poder, el triunfo de Lula reposiciona a los BRICS en Latinoamérica con un gobierno de izquierda en la principal potencia latinoamericana.
Las oligarquías no se quedarán quietas ni EU. Bolivia produce 300 mil toneladas de trigo, pero requiere de 700 mil toneladas, de acuerdo a una editorial del diario La Opinión. Es obvio decirlo, pero con la harina se produce el pan de todos los días para las familias bolivianas. El o uno de los principales abastecedores de harina de trigo es Argentina. El precio de la harina que se produce en Argentina se incrementó al devaluar Milei la moneda ante el dólar, lo que repercutió en el incremento del costo de la harina para los bolivianos.
Como son tiempos de elecciones en Bolivia, la derecha ha politizado el tema. En las redes se le ha dado vuelo a este asunto, se ha politizado, debido a un supuesto efecto negativo que ocasiona en la economía de Bolivia que es deficitario en la producción de harina, pero que lo puede resolver. Se trata de dar un golpe político, como si de eso dependiera el gobierno revolucionario boliviano. La harina boliviana está subvencionada por el gobierno, de tal manera que la situación bajo control y es en la región de Cochabamba (frontera con Argentina) en donde se agudizó la situación.
El triunfo de Milei, en Argentina, no le da como para convertirse en un “prócer” de la derecha latinoamericana. Si bien es cierto que Argentina ha jugado un rol de primer orden en la economía regional y con respecto a algunas regiones en el mundo (productora de trigo para Rusia, por ejemplo), primero tendrá que vérselas con el pueblo argentino que no aceptará fácilmente un modelo que ha demostrado su fracaso en el mundo y que Milei (como en el pasado Pinochet, en Chile) quiere revivir haciendo de Argentina el nuevo “conejillo de indias” de las oligarquías y élites mundiales.
Venezuela reclama el territorio de Esequibo que representa el 70 por ciento del territorio de la actual Guyana. Le pertenecía, ahí se encontraba la antigua Capitanía General de Venezuela, desde donde se conectaban con otros puertos caribeños para la exportación de productos hacia la península Ibérica. El territorio de Esequiba que ahora posee riquezas petroleras explotadas por compañías estadounidenses, fue invadido por Inglaterra porque solamente compraron a Países Bajos 51 mil 700 kilómetros. En los acuerdos iniciales, se reconocieron los límites de Venezuela hasta el Rio Esequibo, que abarca todo Esequibo (ver Carlos A. Romero, Venezuela-Guyana: las razones de un conflicto).
Antes de los acuerdos de 1899 los británicos invadieron el Esequibo y recorrieron sus fronteras hasta lo que hoy es la frontera entre Venezuela y el territorio de Esequibo, la actual Guyana. En 1899 se da a conocer el Laudo de París que, entre potencias coloniales, despojaron a los venezolanos de ese territorio. Venezuela siempre ha considerado ese acuerdo como nulo. Históricamente, ni duda de que se trató de un despojo. El descubrimiento de petróleo y el interés de EU han realineado las relaciones entre Guyana y EU. Guyana, sus gobiernos, dejaron el socialismo cooperativo por una política pragmática que les beneficia ahora por el tema petrolero (ver Carlos A. Romero, Venezuela-Guyana: las razones de un conflicto).
Previamente, en 1840 los ingleses encargaron Robert Schomburgk delimitar sus fronteras. Fue una maniobra imperial para quedarles con el ahora Esequibo. Por lo que el territorio inglés se incrementó, o sumó producto del despojo, casi 80 mil kilómetros cuadrados. Lo decretaron jueces de las potencias que excluyeron a los venezolanos. Un acuerdo tomado sobre el territorio venezolano, pero sin representantes de esa Nación, excluidos por el gobierno inglés. (Ver nota de BBC: Angel Bermúdez (9 de diciembre de 2023) El Laudo de París. El polémico fallo de 1899 que dejó al Esequibo en territorio de Guyana (y por qué ahora Venezuela lo considera “nulo e írrito”).
En Venezuela, se llevó a cabo una consulta para darle legitimidad al reclamo e, incluso, con el apoyo de sectores opositores al gobierno revolucionario, logró el apoyo de la población. Es importante recalcar que desde el punto de vista histórico Venezuela fue víctima de un despojo, como ocurrió con México: se trató de acuerdos entre potencias imperiales que la despojaron de 159 mil kilómetros cuadrados. El acuerdo o Laudo de Paris lo tomaron dos jueces ingleses, dos estadounidenses y un ruso.
En México, la oposición se ha enfocado en denunciar la inseguridad y violencia que llegó con la aplicación del modelo de economía neoliberal, que ellos mismos apoyaron. Ahora, engañaban atacando las consecuencias sin ir a las causas de un fenómeno que se convirtió en social. Ante el fracaso de la oposición, éstos han visto en la violencia una veta a explotar. Complicado, pero creo que su destino está sellado: la diferencia entre Claudia y Xóchitl es abismal en todos los sentidos e imposible de revertir, y menos con una candidata (Xóchitl) con identidades sobrepuestas que ni los representantes de la oligarquía la aceptan porque les da asquito…
(Continuará).