Se incrementan los homicidios en razón de homofobia, en Morelos
A consecuencia de la homofobia, los asesinatos contra la comunidad lésbico-gay se han incrementado en el territorio estatal, denunció Alfonso Leija Salas, de la “Colectiva Diversa”.
Asimismo, externó que no existen cifras al respecto; sólo las noticias que se difunden en “la prensa amarillista” y otros espacios de carácter mediático. Por ende, se darán a la tarea de establecer un cuadro estadístico y, a la vez, harán un seguimiento sobre las investigaciones que realizan las autoridades del ramo. La procuración de justicia tampoco ha operado. “No hay respuesta ni estado de derecho”.
De igual forma, adujo que Morelos y Guerrero son las entidades federativas en las que este tipo de crímenes se han exacerbado. Y, en tal sentido, acotó que son los travestis (hombre que se viste y se maquilla como una mujer y que, generalmente, actúa en un espectáculo) los más asesinados.
En entrevista, agregó que le han dado seguimiento a denuncias “de varios casos” de asesinatos. En lo sucesivo, van a desarrollar un esquema de búsqueda y análisis en torno a “cuántos casos hay”. Algunos aparatos de difusión masiva dan cuenta de los decesos, mas sólo queda en ese ámbito; no trasciende hacia las esferas de justicia. “No hay un seguimiento…”.
Por ende, emitió un llamado a la sociedad, a efecto de que “se aprenda a vivir con tolerancia”, sin prejuicios ni clasificaciones racionales o de clases. Quienes poseen alguna preferencia sexual distinta “los protege la ley”; tienen derechos humanos. Esta cultura del aborrecimiento no puede detenerse, en tanto los estigmas continúen. “La homofobia; la palabra como tal, es odio hacia las diferentes sexualidades”. El extremo son asesinatos; empero, “existen michas infracciones del derecho”, como: despido de un trabajo (sin causa justificada); acoso y más. “Mucha gente se suicida, porque no puede aguantar esta resistencia… Esta presión social… Los mismos padres no aceptan”.
Hizo referencia sobre el comportamiento cotidiano de las parejas homosexuales, en la calle y plazas o en cualquier sitio con concurrencia de personas: “tengo 38 años trabajando en este tema. Todavía me sigue sorprendiendo cuánta gente hay en el clóset”.