Repaso - ¿Y LOS RECURSOS PARA LAS CONMEMORACIONES MAGISTERIALES?

No hay que desviar la atención: la responsabilidad de entregar recursos históricamente designados para los festejos relacionados principalmente con el Día de la Educadora y el Día del Maestro corresponde al gobierno del estado, pésimamente conducido por Cuauhtémoc Blanco Bravo y so cohorte de principales colaboradores.

Para la representación sindical existen convenios formalizados desde hace varios años, dentro de los cuales quedaron incorporados esos rubros en las negociaciones prestacionales con la parte oficial. El regateo institucional empezó a agudizarse, si mal no recuerdo, con la gestión de Graco Ramírez, pero se ya hizo crisis, por lo sucedido hasta ahora, en este periodo desconcertante que encabeza un ex futbolista.

Nada extraño sería, pero sí reprobable, que, como Poncio Pilatos, los funcionarios estatales se laven las manos y se limiten a “gestionar” las demandas sindicales en el ámbito central, desde donde, para el caso que abordo, Armando González Zozaya, director general del Sistema de la Nómina Educativa Federalizada, le respondió a Eliacín Salgado de la Paz, titular del IEBEM que la referida Unidad Administrativa “concluye que se encuentra material y legalmente impedida para otorgar recursos en forma distinta a la antes señalada”.

En consecuencia, Salgado de la Paz comunicó a la secretaría general de la Sección 19 del SNTE, Gabriela Bañón Estrada, en oficio fechado el 13 de abril pasado, la respuesta del funcionario federal aludido. Eliacín no se refirió a los festejos arriba mencionados, sino a los recursos que serían "utilizados para el apoyo a los trabajadores de la educación para enfrentar la situación de salud derivada de la pandemia". Quizá así lo explicó, porque Bañón Estrada, al hacer el requerimiento por segunda ocasión, sostuvo que dichos recursos económicos serían redireccionados “a beneficio de los compañeros integrantes de esta Sección Sindical”, insistiéndole en la urgencia de dar cumplimiento a ese asunto, "dado que los compañeros están cuestionando sobre los del año pasado y los actuales”. La aclaración de Bañón Estrada es entendible, pues sus críticos están duro y dale en que malversó esos recursos, cosa hasta el momento a todas luces falsa.

Con todo lo anterior, pareciera que la administración del oriundo de Tepito, en malogradas funciones de mandatario estatal, dio por cumplido lo único que puede hacer, que es servir de tramitador frente a la federación, en tanto que por su cuenta todo indica que no aportará cantidad alguna. ¿Estoy en lo correcto o sorpresivamente el gobierno estatal anunciará que destinará recursos propios, no de la federación? Lo veo muy difícil. Este sexenio se ha caracterizado por su desdén, su modorra, su negligencia, su incapacidad, respecto de las demandas magisteriales.

No hay que darle vuelta al tema: quien regatea los recursos para esos fines es el gobierno estatal. ¿Qué otras acciones deben emprenderse sindicalmente para obtener una respuesta satisfactoria? Mientras lo piensan y lo realizan, está visto que aún hay quienes creen que esos recursos se utilizarían para campañas electorales o para otros gastos ajenos a su principal propósito. Como son meras suposiciones, en tanto que nada se ha recibido, queda la impresión de que con ese tipo de especulaciones se soslaya el incumplimiento institucional.

La verdad, Cuauhtémoc Blanco tiene mucha suerte o sus operadores actúan bien para que ningún problema o desinterés de su parte, ponga en riesgo la tranquilidad con la que despacha, a veces, en la oficina principal de Palacio de Gobierno. Es fama que ha actuado con una ligereza pasmosa, anclada sin duda en que, con la clase política del estado, la de presunta oposición, nada tiene que temer. Como que la compara con mansos corderitos. Por eso actúa como le da su regalada gana. Allí está su más reciente trastada, al restarle total importancia a la conmemoración de un aniversario más de la creación de nuestro estado. Lo morelense le viene valiendo sorbete.

De ahí que el tema de los recursos que debe asignarse al magisterio en los renglones aquí comentados, podría atenderlo con olímpica indiferencia.

Si hubiese una genuina preocupación oficial, ya estaría Eliacín Salgado de la Paz dando sus propios argumentos, pero no incurriendo en el pretexto que desde México no hay nada. Más bien, lo que se le exigiría es que explicara por qué en el plano estatal no tienen pensado hacer un esfuerzo y cumplirle a los docentes del estado.                

Depender casi absolutamente de la federación para el presupuesto en educación, volvió al actual régimen gubernamental en atenido y conformista. Ya veremos qué pasa en estos días.

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