Participan Leonardo Montellano y Ander Gómez por Morelos en nacional de tenis
El Instituto del Deporte y Cultura Física del Estado de Morelos (Indem), dirigido por Juan Felipe Domínguez Robles, dio a conocer que Leonardo Montellano Magaña y Ander Gómez Salas Villegas, de la categoría 14-15 años, son los tenistas que clasificaron a los Nacionales Conade 2025, donde buscarán obtener una medalla frente a los mejores atletas juveniles del país.
Domínguez Robles mencionó que, previo a esta etapa macroregional llevada a cabo en el complejo panamericano de tenis en Guadalajara, Jalisco, la selección de tenistas morelenses tuvo una serie de entrenamientos y encuentros de fogueo, como parte de su preparación para encarar la antesala nacional.
Asimismo, detalló que la dupla de Leonardo Montellano y Ander Gómez obtuvo su pase a la justa nacional en la modalidad de singles y en dobles, tras salir victoriosos ante sus similares de Colima, Guanajuato y Aguascalientes.
De igual manera, reconoció a Camila Valero Zepeda y Adamari Alvarado Lara, de la misma categoría, y a Ana Karen García Ortega, Gretel Aguirre Peña, Pedro Zepeda Cáliz y Pablo López Vázquez Reyes, de la categoría 13-14 años, por sus destacadas actuaciones en sus competencias, mismas que les hicieron obtener el tercer lugar en sus respectivas categorías, quedándose cerca de clasificar a la justa nacional.
Finalmente, el titular del Indem reiteró el respaldo del Ejecutivo estatal, encabezado por Margarita González Saravia, hacia los practicantes del deporte blanco, quienes seguirán en preparación tanto para los Nacionales Conade 2025 como para sus demás competencias.
El tenis juvenil en México ha cobrado relevancia como un espacio clave para el desarrollo deportivo y personal de las nuevas generaciones. En los últimos años, se han fortalecido programas de formación en clubes, academias y escuelas públicas, lo que ha permitido identificar y potenciar talentos desde edades tempranas. Torneos locales y nacionales, como los organizados por la Federación Mexicana de Tenis, ofrecen plataformas para que jóvenes demuestren sus habilidades y compitan en un entorno estructurado. Este impulso no solo fomenta la disciplina y la salud física, sino que también contribuye a reducir problemáticas sociales al ofrecer alternativas de ocupación positiva para niños y adolescentes.
La práctica del tenis juvenil promueve valores como la resiliencia, el trabajo en equipo y la gestión de la presión, habilidades transferibles a otros ámbitos de la vida. Además, el éxito de tenistas mexicanos en el circuito internacional, como Santiago González en dobles, sirve de inspiración y muestra las posibilidades de crecimiento en este deporte. Sin embargo, persisten desafíos como el acceso desigual a instalaciones de calidad, especialmente en regiones marginadas, y los costos asociados a equipos y entrenamientos, que limitan la participación de jóvenes de escasos recursos. Iniciativas públicas y privadas buscan mitigar estas barreras mediante becas y alianzas para democratizar el acceso.
En el ámbito competitivo, México ha logrado posicionar a jóvenes promesas en torneos continentales y mundiales, como la Copa Davis Junior o los ITF World Tennis Tour, lo que refleja un avance en la preparación técnica y táctica. La inversión en entrenadores certificados y metodologías modernas, basadas en análisis de datos y seguimiento biomecánico, está elevando el nivel del tenis juvenil. Aun así, se requiere mayor articulación entre instituciones educativas y deportivas para integrar el tenis como parte de programas escolares, ampliando su alcance y detectando talentos que, de otro modo, pasarían desapercibidos.
Las perspectivas del tenis juvenil en México son alentadoras, con un creciente interés por profesionalizar la base y expandir su influencia. Proyectos como la construcción de centros de alto rendimiento y la vinculación con universidades para ofrecer becas deportivas apuntan a retener talentos y evitar la deserción. Además, el uso de redes sociales y plataformas digitales para difundir logros y entrenamientos está atrayendo a más jóvenes hacia el deporte. Si se mantiene el apoyo institucional y se prioriza la inclusión, el tenis mexicano podría consolidar una generación capaz de competir en escenarios globales, al tiempo que fortalece su papel como herramienta de transformación social y desarrollo integral de la juventud.