No es suficiente aún la lluvia para productores del Oriente
Jorge Rafael Sánchez 
Hay temor entre los campesinos por el irregular temporal de lluvias que se han presentado en Morelos, lo que afectará las siembras de granos básicos y de legumbres que requieren del vital líquido para florecer. Manifestaron que se tenía confianza en que este año las lluvias serían regulares y el problema es que no es así, a veces lluvia hasta con granizo y eso también afecta a las plantas.
Líderes campesinos estiman que cientos de productores de sorgo y maíz, se verán seriamente afectados, por la escases de lluvias, ya que empezaron las siembras y no hay una precipitación de agua normal. Y de igual forma cientos de hectáreas de cultivos que están en riesgo por la escases de lluvia, dio a conocer David Padilla Marín, del Barzón Morelos, “la falta de lluvias podría generar mayores afectaciones en estos cultivos”.
Expresó que si bien las lluvias no se pueden controlar, el problema es la deforestación que se ha permitido en las zonas boscosas y también contaminación que ha ido generando el problema como el calentamiento global. Por si fuera poco, sostuvo que además se han ido dañando las tierras por el uso de venenos e insecticidas que se utilizan para los diferentes cultivos.
A pesar de que había optimismo en los campesinos de Morelos en que este ciclo agrícola traería buena producción, ahora están preocupados por la ausencia de precipitaciones pluviales, alertó Padilla Marín. “Al no llover en los terrenos de cultivo se corre el riesgo de que la semilla no germine y, por lo tanto, que no exista una producción adecuada para abastecer la alimentación humana y animal”, detalló.
Dijo que para este temporal, en Morelos, “cada productor invirtió al menos 15 mil pesos desde la siembre hasta la cosecha, y tres mil o cuatro mil pesos por hectárea; pero es un recurso se va a la
basura”. Relató que esperan la aparición de precipitaciones pluviales para rescatar la siembre de milpa y evitar que sea un temporal improductivo, a pesar del fenómeno de la canícula.
Sostuvo que las lluvias están ausentes de los campos de Morelos, al grado de que se arriesgan cientos de hectáreas de cultivos de temporal; de las pocas precipitaciones que hay, la mayoría son dispersas y no humedecen las parcelas. Indicó que hay riesgo de que la falta de agua en los cultivos no cumpla con el ciclo de la siembra de maíz y sorgo y no haya producción como se había planeado.
