Las ¨Nenis¨ se agrupan por temor a ser víctimas del hampa
Jorge Rafael Sánchez 
Luego del asesinato de la joven Evelin Afiune Ramírez, el pasado fin de semana, cientos de mujeres, la mayoría amas de casa, que se dedican a la venta de ropa, productos de belleza y otros artículos como perfumería y relojería, por medio de las redes sociales, empezaron a cancelas citas y en diferentes casos a dejar en claro que solo harán entrega de pedidos en lugares públicos.
El miedo, el temor y hasta el horror se apoderó de los cientos de vendedoras conocidas como “Nenis”, luego del brutal crimen de Evelin, por lo que ellas mismas han conformado un tipo de apoyo de auxilio para que en caso de que se vean en peligro, llamar la atención de sus compañeras de ventas.
Expresaron que ahora deben de tener más cuidado, algunas de ellas, que hacían entregas en lugares como el café Italian Coffe, que se encuentra cerca del centro de la ciudad, cancelaron sus citas y las cambiaron. “Hasta el uso del imbox, lo estamos considerando, porque el temor y el
medio creció entre todas las mujeres que se dedican a la venta de productos y artículos por medio de las redes sociales”, destacaron.
Este tipo de ventas se empezó a hacer popular desde hace algunos años, cuando cientos de mujeres, a las que se les identificó primero como “bazares”, se empezaron a dedicar a la venta de ropa sobre todo usada, pero en buenas condiciones. Así lo mismo se comercializó un vestido, que blusas y faldas, pantalones, para también hacerlo con el calzado, todo ello de uso, aunque en buenas condiciones.
La manera para hacer ventas, contactos y comercialización fueron las redes sociales, se crearon chats en donde las mujeres, principalmente madres solteras, o que buscaban apoyar la economía familiar, empezaron a vender la ropa que ya no utilizaban, calzados y otros artículos, algunas hasta metieron productos de belleza, como lápiz labial, cremas, perfumes y relojes.
María Mondragón Espinosa una de las “nenis”, dijo que de las “bazares” se pasó a lo que hoy se les nombra de manera sui generis como “Nenis”, para identificarlas, debido a que en la comunicación que se hace, se habla de nenas, o nena, para identificarse entre vendedoras y compradoras.
Manifestó que no es fácil poder hacer las ventas por medio de las redes sociales, “tienes que buscar un lugar público para entregar las prendas, el calzado o los otros productos que vendes, porque se corren riesgos. Por eso, nosotras buscamos los lugares públicos, acá en Cuautla, es la Alameda, la calle de Bollas sin Cabeza, a la altura de una tienda de telas y otras más lo hacen frente a la biblioteca Abraham Rivera”, detalló.
Aunque ahora, puntualizó que hay miedo, mucho miedo, porque no hay seguridad, no hay protección, y “tenemos miedo de que cualquiera de nosotras pueda ser una nueva víctima, por eso estamos buscando la forma de auto protegernos, de que sí hay riesgos tengamos una forma de comunicarnos para que nos apoyemos”.
