Indaga CDHEM abuso policiaco
Ante un posible abuso policiaco contra una adolescente -suscitado en Zacatepec-, que se vertió en redes sociales, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos inició una queja de oficio.
Juan Lagunas
Su titular, Raúl Israel Hernández Cruz, “en el ejercicio de sus facultades legales” inició la queja: 33/2019-VRSP. En la integración de este documento, radicada en la Visitaduría Regional Sur-Poniente, con sede en Jojutla, y a cargo de Aurelia Castañeda, se solicitarán los informes a las autoridades señaladas como responsables, como lo son: la Secretaría de Gobierno, la Comisión Estatal de Seguridad Pública y el Municipio de Zacatepec.
Esta Comisión invita a la ciudadanía a conocer sus derechos, reconocer sus obligaciones y hacer exigible el respeto a sus prerrogativas, mediante la denuncia de cualquier acción y omisión de servidores públicos.
Asimismo, hace un llamado a las autoridades para mantener jornadas de capacitación constantes en materia de sensibilización, protocolos de actuación, uso de la fuerza y derechos humanos.
Descripción de las escenas
En el video, se pueden divisar a una mujer uniformada y a una alumna, ataviada de ropa escolar, quienes forcejean. Se escuchan gritos de una mujer; otros agentes expresan: “Suéltala… suéltala” y logran separarlas.
Asimismo -unos segundos después-, la mujer policía se dirige hacia donde la infante, y continúa el sometimiento. El murmullo es estentóreo y continuo. Alguien vocifera: “¡Le pegaron a la niña. Primero, fíjense!”.
Acto seguido, una versión en “off” más: “Le pegó a la niña… la oficial… a la niña de secundaria… Yo pasé cuando la oficial le pegó a la niña…”. Luego, la agente se arregla el cabello, cuyo largo se extiende hasta casi la parte baja de la espalda. Se mueve de un lado a otro. Porta un chaleco; en la parte frontal de éste, un radio. Trae, además, una camisa blanca (con un logotipo, en la parte superior derecha) y un pantalón negro. “Va a ver demanda. De una vez hay que hablarle a los abogados”, siguen…
La mujer se dirige hacia una patrulla, cuya leyenda, en un costado, dice: “Policía de Tránsito”. Abre la puerta. Se queda un instante ahí. Suenan los cláxones de vehículos automotores.
