Repaso - SECCIÓN 19 SNTE- ¿A QUIËN BENEFICIARÏAN LOS CAMBIOS DELEGACIONALES?

El voto universal, directo y secreto, es la fórmula infalible para que los trabajadores agremiados al SNTE registren con total libertad su preferencia para la designación de la nueva dirigencia seccional en Morelos.

Esa decisión, desde luego, debe estar anclada en el convencimiento fundamentado de la fórmula o planilla con la que se simpatiza, así como de la persona que la encabece para la secretaría general. Si es de otro modo, en el que prevalecen las simpatías irreflexivas, las complicidades incluso, el potencial democrático al que se alude en jornadas electorales como la que ya viene en la Sección 19, puede empantanarse irremediablemente.

El proceso, por cierto, no es sólo el resultado de los votos emitidos. Tiene varios momentos, Uno de ellos es la renovación, cuando se han cumplido los plazos estatutarios, de las representaciones delegacionales o la creación de nuevas delegaciones, no como estrategia para pulverizar algunas “fuera de control”, sino como necesidad para que grupos de agremiados estén más cercanos a los compañeros que seleccionen para representarlos.

Una oportunidad histórica de los integrantes del SNTE es, por fin, hacer valer su preferencia individual y no “cederla”  a algún delegado en particular, como era costumbre que sucedía. Recuérdese que aquellos que acudían a un congreso en el que tendría lugar la unción de nuevos integrantes de un comité seccional, en su gran mayoría actuaban “para su santo”, valiéndoles sorbete lo que pensaran sus compañeros de delegación o centro de trabajo. Por lo general se aliaban con otros para apoyar a la planilla anticipadamente ganadora, que casi siempre era la única registrada.

Ahora los tiempos pueden ser otros y mejores. Es muy posible que ni secretarios delegacionales, ni delegados nombrados para un congreso o asamblea general, tengan una influencia determinante para orientar el voto de todos sus representados, siempre y cuando éstos razonen y argumenten la decisión que van a tomar al momento de marcar su boleta. Ni el líder delegacional con mayor carisma puede ofrecer a la planilla de sus querencias el total respaldo de los integrantes de su escuela o de su centro de trabajo.

A pesar de lo anterior, no me sorprende que tras la integración de las planillas delegacionales esté la mano negra de uno o varios aspirantes. ¿Los maestras, maestros y demás trabajadores de apoyo a la educación estarán enterados de los vínculos de quien quiere representarlos con el grupo o personaje que aspira a dirigir la Sección 19? Si ese asunto no se aclara, se mantendrá el vicio de usufructuar el sufragio de sus compañeros en aras de sus afinidades personales y de sus intereses específicos.

Vale la anterior reflexión para alertar a los sindicalizados del SNTE sobre los pronunciamientos triunfalistas de estos días. Ayer lunes ya dio inicio la renovación de representantes delegacionales y, de acuerdo con la secretaría general, Gabriela Bañón Estrada, todo se realizó de manera transparente. Ojalá que así siga en lo que falta.

Hay que insistir, sin embargo, en que los nombramientos resultantes no pueden ser considerados como elementos de valoración que suponer cuál aspirante tiene asegurado el triunfo. !¡Brincos dieran!

De refilón

Eso sí, el proceso democrático transparente al que se aspira, puede también toparse con pared si la integración del órgano electoral correspondiente, que sería el autorizado para avalar las distintas fases de esta contienda, se integra con elementos claramente inclinados hacia una corriente o expresión contendiente.

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