Observador político - Jazmín Solano, Jesús Corona y otros ediles perdedores…

La decisión de un importante sector de la población que acudió a votar el pasado domingo, con su sufragio, prácticamente desarmó y ató de manos  jurídica, política y socialmente a la mayoría de los candidatos perdedores el seis de junio. Sin embargo, llama poderosamente la atención que los municipios donde los ediles intentaron reelegirse y no les favoreció el voto, es justamente hoy, donde se ha desatado el caos ante la complacencia de las autoridades electorales y de seguridad pública.

LA TRAICIÓN DE JESÚS CORONA.- En el 2018 muchos actores políticos que contendieron por primera vez se alzaron con el triunfo al participar con la marca de Morena y la ola ganadora de Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, muchos de estos personajes al llegar al poder se desviaron del proyecto de la Cuarta Transformación y tomaron decisiones propias, sin tomar en cuenta a su dirigencia estatal ni a sus diputados. Se sintieron libres, auténticos, poderosos política y socialmente por lo que sus acciones fueron unipersonales. Poco les importó alejarse de quienes los llevaron al triunfo.

Este ejemplo se dio en Cuautla, donde el alcalde que postulo Morena en el 2018 y llevó al triunfo, Jesús Corona quien perdió el rumbo y en automático salieron a relucir diversos actos de corrupción y extorsiones que quedaron plasmados en las denuncias que sus propios trabajadores hicieron, así como empresarios y la sociedad en general.

Incluso, los sindicalizados del Ayuntamiento presentaron una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción en contra el alcalde porque argumentaron que Jesús Corona, les adeudaba más de cinco millones de pesos en perjuicio de 523 trabajadores y hasta la fecha, el tema no se ha logrado solucionar.

Tal parece, el aún edil llegó al cargo para llenarse los bolsillos de dinero e intentó, reelegirse pero al no lograr el respaldo de la dirigencia de Morena que lo dejó fuera de toda posibilidad, renunció al partido que lo llevó a la alcaldía y le apostó todos sus bonos a Acción Nacional, confiado que su carisma, el personal de la comuna y la infraestructura del Ayuntamiento así como los recursos púbicos que aún administra serían suficientes para ganar la elección y perpetrarse otros tres años en la presidencia municipal. Le falló su apuesta y su traición.

Empero, hoy que la ciudadanía le dio la espalda y tras perder a manos del candidato de Morena, Rodrigo Arredondo López, a quien le favorecen las tendencias, en automático iniciaron las acciones para echar abajo la elección de Cuautla y los actos vandálicos.

Jesús Corona, traicionó a Morena y a los cuautlenses quiénes se la cobraron chulo y bonito al negarle su voto, empero el ahora panista debería de estar preocupado por las auditorías que vendrán ante el cúmulo de señalamientos que con fundamentos de actos irregulares en el manejo de los recursos públicos se han hecho, así como por las obras que se hicieron con dudas de que tuvieron costos superiores a los establecidos. Antes de intentar boicotear y frenar los votos de la población, debería de preocuparse por dejar una administración en orden, con transparencia y rendición de cuentas. Al final, es difícil desacostumbrarse a la buena vida de un alcalde como sucede hoy en día con Jesús Corona de Cuautla.

TEMIXCO EN EL OJO DEL HURACÁN.- Una situación que es prácticamente una copia al carbón de lo que sucede en el oriente, es Temixco donde Jazmín Solano, con fuertes y duros señalamientos que ha tenido durante su periodo como alcaldesa, evidenció y demostró su ambición política y económica al tratar de reelegirse en el cargo y para lo cual, tuvo que renunciar a Morena, de donde se desligó desde el primer minuto que llegó a la alcaldía, por lo que competió y perdió el cargo que aún ostenta con la patente del Partido del Trabajo.

Para nadie es un secreto que Temixco, uno de los municipios más importantes del estado, está sumido en la inseguridad, el abandono y pésimos servicios públicos municipales. De obras ya ni hablemos, solo de relumbrón pero sin un beneficio importante para la ciudanía que le mostró su rechazo en la elección del domingo pasado. La gente la reprobó y hoy, intenta ganar en la mesa lo que perdió en las urnas.

Solo hay que remitirnos al 2018 cuando Jazmín Solano López al rendir protesta como alcaldesa de Temixco, juró y perjuró que trabajaría de la mano con el Ejecutivo para ofrecer una mayor seguridad a sus gobernados. Falló.  Anunció que impulsaría el desarrollo de esta localidad mediante diversos programas, además de que mejoraría el aeropuerto ubicado en el poblado de Tetlama, así como la zona arqueológica de Xochicalco y a la comunidad de Cuentepec, mintió porque no hizo nada de estas promesas y solo como ejemplo, lo del aeropuerto le corresponde a la federación y al estado, pero lo dejó patente en su discurso.

Lo mismo que trabajaría de la mano con el gobierno del estado para el combate de la inseguridad, hoy Temixco está sumido en la inseguridad y sin forma de cómo contrarrestar los delitos que se cometen en el municipio. La crítica de sus habitantes va en el sentido de que se ha preocupado más por la construcción de su nuevo edificio en la presidencia municipal que en generar certidumbre y confianza en seguridad con la CES y el estado. Por esa razón no es extraño que el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), haya dado cuenta que delitos como los homicidios dolosos, extorsión, abuso sexual, secuestro y robos se hayan incrementado de manera alarmante.

Aún y con todo eso y los señalamientos de coaccionar el votos intenta echar abajo los resultados de la elección donde Morena ganó la elección, partido al que decidió renunciar cuando no le dieron la candidatura.

OCUITUCO.- Otro que no canta mal las rancheras es Juan Jesús Anzures García, edil de Ocuituco, donde al intentar reelegirse y la votación no le favoreció, inició actos vandálicos con sus simpatizantes, quemando casillas y tratar de impedir el conteo de votos de la elección. Algo que será difícil de llevar a cabo pese a la alianza que está logrando con los demás perdedores.

Obvio, de las acusaciones de desvió de recursos por 7 millones de pesos los rechazó al asegurar que estos fueron ejercidos en obras.

Así las cosas, los municipios en donde los alcaldes que intentaron reelegirse y perdieron, es curiosamente, donde se están generando los brotes de violencia y los actos vandálicos para echar abajo los resultados electorales, algo que será prácticamente imposible de lograr porque éstos ya están computados.

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