La escuela más allá de las aulas

En opinión de Marisol Arroyo Cruz

La  escuela  más  allá  de  las  aulas

La  semana  del   27 al  31  de julio,  en  todo  el  país  se  reunieron  virtualmente docentes  de Educación Básica con el  propósito  de  reflexionar  sobre  temas educativos  importantes en el  taller  intensivo de capacitación “Horizontes: colaboración y  autonomía  para  aprender  mejor”.

Un  taller  inusual  y diferente…en esta  ocasión  el encuentro  estuvo  mediado   por dispositivos electrónicos.  En colectivo se discutieron problemáticas particulares  de cada  escuela, desde  educación  inicial  hasta   secundaria. Todos  los  actores educativos  supervisores, asesores, directivos y docentes reunidos  con un solo fin;  la  educación  de  los niños  y adolescentes  en  México. 

Dos situaciones  estuvieron   latentes en el taller, por  un lado la  incertidumbre  y  la  urgencia  de adaptarnos  a  las  nuevas condiciones, pero  por  otro  lado, el deseo  de  encontrarnos,   mirarnos, reconocernos y  regresar  a  nuestro  espacio  común:  la  escuela.

La reflexión nos  permitió darnos  cuenta  que  la  escuela  no  se  limita  a las  aulas, mismas que se  encuentran  vacías, cerradas y  lejanas. Más  allá  de las  aulas,   los  maestros  hemos  podido  mantener  vivo  el vínculo  con los  estudiantes.  Hoy  los actores  educativos   nos  unimos  desde  nuestros  espacios  distantes, con la  conciencia  de que  pertenecemos  a un espacio  común:  la  escuela.

Pensando  en ello,  trabajamos   con el  propósito   de plantear  las  mejores  estrategias  para  nuestros  alumnos,  para  quienes  tienen  acceso  a las  tecnologías  y  para  quienes  no  lo tienen,  para quienes  pueden  acceder   a  través  de  un dispositivo, pero también  para  quienes  no  tienen  esa  posibilidad.  Nuestro compromiso  es  con todos  ellos.  Por  ellos  y  para  ellos   elaboramos  e intercambiamos planes, proyectos, concepciones, experiencias, conocimientos y  habilidades.

Las  brechas  sociales,  económicas, digitales  y  estructurales  están presentes, no  podemos  negarlas, sin embargo,   la  educación  es  la  única  vía   para  disminuir  estas  brechas. Los  docentes  estamos  convencidos  de  ello. La  tarea  no  será  fácil, sin  embargo,  debemos  asumir  el compromiso, empecemos por   intercambiar  experiencias  y  sistematizar  las  enseñanzas  que  nos  deja  la  pandemia. La  estrategia  gubernamental  está  planteada, nos corresponde  a los  docentes  diseñar  las  mejores  actividades  para  nuestros  alumnos, adaptar  y complementar  la  propuesta   con el  conocimiento  de cada   contexto escolar y  de cada  estudiante.

Más  allá  de las dificultades  tecnológicas, nos  queda  el  compromiso  de  plantear proyectos innovadores, buscando   formas  de  acercarnos con    nuestros  alumnos  y fomentar  las  habilidades  socioemocionales para  afrontar  la  situación.  La  idea  es  acompañar  los  procesos  formativos individuales. Los  maestros  son insustituibles  es  cierto, pero  quienes  dan razón de  ser  a  los  maestros  son los  alumnos, sin ellos, no hay  vinculo  posible. Lo que da  vida  a la  escuela  son los  actores  educativos; alumnos, docentes   y  padres  de  familia. La  invitación es  construir  escuela, seguir  siendo comunidad  escolar, mantener  viva  a la  escuela…más  allá  de  las  aulas.