Juego de Manos - ¿La nueva política?
En opinión de Diego Pacheco
A unos meses del triunfo de la pareja fosfo-fosfo en Nuevo León, podemos ver como comienzan a configurar una imagen de gobierno acorde a los símbolos y valores que se desprenden del uso de las nuevas tecnologías, enfocada en gran medida a un público joven que, en la actualidad, representa uno de los demográficos más importantes para los triunfos políticos en las urnas.
El auto nombrado Gobierno del Nuevo Nuevo León se ha caracterizado —por la propia dinámica de quienes lo encabezan— por imitar algunas formas de influencers, y apuesta en gran medida a la comunicación institucional vía redes sociales. En este sentido, la actividad política y burocrática se pinta de rosa (o naranja) para hacerla ver como una acción aspiracional; aunque, en la práctica, ni pegar calcomanías es tan divertido, ni los trámites de gobierno son tan glamurosos. La realidad es diametralmente distinta, pero están contando una historia, llevan las riendas de la narrativa y el público, al no cuestionarlo, se convierte en un mero ente consumidor (hasta ahora).
Ahora bien, mucho se habla de la innovación que llevan a cabo estas dos personas, existen incluso quienes señalan su forma de comunicar como pionera, innovadora, pero ¿será? No necesariamente. En México, son cada día más las figuras políticas que le apuestan a campañas y mensajes a través de redes sociales (e invierten sumas importantes de dinero en ello). De hecho, sin irnos demasiado lejos, este tema fue motivo de debate durante las elecciones pasadas en Morelos, entre quienes apostaban todo a comunicar a través de internet y quienes se mostraban más conservadores y, entonces, argumentaban que los medios tradicionales seguían siendo imprescindibles dentro de la estrategia de comunicación. El resultado ya lo conocemos.
Y es que, a pesar de las ventajas que ofrece comunicar a través de redes sociales, también existen muchas limitantes para su uso, especialmente para los espacios más marginados. Asimismo, no se puede ignorar la saturación de mensajes en internet. Destacar dentro de un mar de contenido representa un reto para la creatividad y la astucia. En ese sentido, dar por hecho que todas las personas podrán ver nuestro mensaje a través de redes es un error de juicio que puede derivar en un auto sabotaje.
Por otro lado, podemos entender la transición de la camisa y el saco por los jeans y la hoodie, el cambio del lenguaje por uno menos institucional y el uso de nuevos medios de comunicación como un cambio de forma, pero no de fondo. La adaptabilidad de la comunicación entera al contexto en el que se lleva a cabo es un fenómeno necesario para mantenerse relevante y ha sido ampliamente analizado, recordemos el icónico debate Kennedy-Nixon de 1960.
Finalmente, la rentabilidad de una pareja política ya ha sido estudiada, discutida y puesta en práctica en múltiples ocasiones. Es efectiva y prueba de ello existe en la historia de nuestro país —el ejemplo más reciente lo encontramos en la relación de Enrique Peña Nieto y Angélica Rivera—. Como sociedad, nos gustan los cuentos románticos y el chismecito, nos criamos con estas narrativas de éxito y de trabajo, de amor para hacer frente a la adversidad. Estos son mitos que siempre se nos ha enseñado a aspirar.
Entonces, si bien no podemos hablar de una innovación en la política, sí podemos dar cuenta de una estrategia de comunicación reflexionada y bien ejecutada. Quizá no estén descubriendo el hilo negro, pero sí están aprovechando sus recursos para proyectar de manera correcta su imagen política. En cuanto a comunicación, no están haciendo cosas nuevas, pero las están haciendo bien.
De San Pedro para…
Aunque Samuel García ocupa la silla de la gubernatura, hay que poner especial atención a la figura de Mariana Rodríguez, quien fue designada como titular de la dependencia “Amar a Nuevo León” y, a su vez, emite a través de redes sociales actividades dentro del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF). Sus publicaciones son interesantes pues, a diferencia de la manera convencional de comunicar de las dependencias públicas, la influencer apuesta todo al storytelling y a la transmisión de emociones. Con o sin intenciones, la imagen política de la sampetrina se fortalece. Bien ahí.
Y es que ha construido una imagen de burócrata/política glamurosa, donde se retrata el trabajo de oficina como algo a que aspirar y donde el cumplimiento de responsabilidades (como la gestión de temas migratorios o la atención a la niñez), se pinta como un logro extraordinario. Vaya, hasta antoja los esquites después de la oficina. Esa es muestra de una gran habilidad de comunicar.
En la administración pública los problemas no se resuelven, sino que se administran. Al interior, los casos de éxito son superados por los retos y las dificultades, debido a la complejidad intrínseca de las labores de manejo de un sistema que evoluciona de la mano de la sociedad, la multiplicación y agudización de los problemas; y la evolución de una sociedad que, evidentemente, está viva.
Los logros se pueden medir de dos formas, con datos duros o con percepción ciudadana, la primera, da cuenta del alcance verdadero de las acciones y depende de una buena estrategia, aplicación y evaluación; la segunda, es la manera en que la población interpreta lo que se hace (o no se hace) y depende de como se presentan las acciones.
Por cierto
En Morelos, se está llevando a cabo la discusión en torno a la despenalización del aborto dentro del Congreso del Estado. Actualmente, el dictamen para garantizar el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y su maternidad se encuentra bajo análisis en el órgano legislativo estatal.
Al respecto, los bandos en favor y en contra de que se apruebe esta modificación a la ley han comenzado a moverse. Los grupos feministas del estado se han movilizado en diversas ocasiones durante este año, la más llamativa de los últimos días se llevó a cabo en el marco del Día de Acción Global por el aborto legal y seguro, el pasado 28 de septiembre. En esa fecha, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos presentó la iniciativa para despenalizar la interrupción voluntaria del embarazo al Congreso del Estado.
Por otro lado, la Iglesia Católica en Morelos, representada por el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro, ha llamado a quienes están en contra de esta medida a manifestarse y mostrar un pañuelo azul en la puerta de sus casas. Asimismo, el obispo ha señalado que colocará lonas en lugares públicos para llamar a proteger la vida desde la concepción.
Indipendientemente de los debates que se generen, dentro del Congreso del Estado, o en las calles con pañuelos multicolores, la determinación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es clara: la penalización del aborto y la criminalización de las personas involucradas es un acto inconstitucional.
¿A favor o en contra?: