Juego de Manos - ¿El fin de la pandemia?

Durante la conferencia mañanera del pasado 8 de diciembre, el presidente de la República anunció la estrategia de vacunación contra la covid-19 en México. En el evento estuvieron presentes el Secretario de Salud, Jorge Alcocer, quien aseguró que la vacuna que se utilice será segura para todas y todos; y el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, quien habló de la esperanza que trae al mundo la vacuna contra la covid-19, así como la importancia de la participación de toda la sociedad en el combate a esta enfermedad. Asimismo, se presentó un calendario con las 5 fases en que se llevará a cabo la vacunación. En breve, estas se dividen de la siguiente forma:  

Etapa 1 (diciembre 2020 a febrero 2021) personal de salud de primera línea de control de la covid-19. Etapa 2 (febrero a abril de 2021) personal de salud restante y personas de 60+ años. Etapa 3 (abril a mayo 2021) personas de 50-59 años. Etapa 4 (mayo a junio 2021) personas de 40-49 años. Etapa 5 (junio 2021 a marzo 2022) resto de la población. Por cierto, Andrés Manuel López Obrador aseguró que esperará a que sea su turno para aplicarse la vacuna, lo que, de acuerdo con el calendario antes presentado, sería entre febrero y abril del próximo año, durante la segunda fase de vacunación.

Antes de continuar, debemos hacer un pequeño paréntesis. La llegada de la vacuna a México no significa el fin de la pandemia, sino que es una medida de prevención más para poder llegar a la meta. Por ello, el uso del cubrebocas y las medidas de sanidad seguirán siendo necesarias para proteger la salud de todas y todos durante el próximo año.

Ahora bien, volviendo al tema, el plan encontró puntos en común y discrepancias dentro de la misma sociedad. Una gran mayoría puede estar de acuerdo en que el primer grupo poblacional en recibir la vacuna debe ser el personal de salud quienes, durante estos 10 meses de pandemia en México, han sido nuestra primera línea de defensa. 

No obstante, a partir de la segunda etapa se desatan argumentos a favor y en contra de la lógica del gobierno de México, dentro de los que destaca la preocupación por que gran parte de la población económicamente activa (es decir, una mayoría de quienes deben salir a las calles para trabajar) recibirá su vacuna alrededor de la mitad del próximo año (si bien nos va). Independientemente de las subjetividades que puedan despertar, la estrategia es oficial y el uso de emergencia de la vacuna de Pfizer y BioNTEch ha sido aprobado por la Cofepris.

Por otro lado, el Secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma, anunció que las entidades federativas que se encuentran en el semáforo epidemiológico verde y amarillo podrán volver a clases presenciales —de manera gradual y en formato híbrido— en enero del 2021.  Al momento en que se escribe esta columna, Veracruz, Chiapas y Campeche se encuentran en verde, mientras que Colima, Oaxaca y Tlaxcala están en amarillo. 

Esta medida es una contradicción con los esfuerzos de prevención de contagios y cuidado de la salud. La vacunación a las personas que no forman parte del personal de salud comenzará en febrero del próximo año, y no será hasta junio que dará inicio para todas las personas menores a los 40 años ¿Cómo es que se pretende arrancar actividades presenciales en la escuela previo al principio la vacunación? Habrá que ver cuantos estados mantienen su color después de las celebraciones del fin de año, de qué manera se implementan las clases presenciales y con qué medidas se pretenderá proteger la salud de las y los asistentes y parientes. 

Predicar con el ejemplo

Se les dijo. Inclusive, se les repitió. Pero se hizo caso omiso. La semana pasada, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció un estado de emergencia por covid-19 en la capital. De acuerdo con el comunicado que rindió ante la prensa, la urbe ha visto promedio de 400 hospitalizaciones al día en el mes de diciembre y, al ser cuestionada sobre la transición de la Ciudad de México al semáforo rojo, Sheinbaum contestó que, más allá del semáforo epidemiológico, se está declarando una alerta por covid-19. Una medida para complementar las acciones sanitarias presentes (o un deslinde de responsabilidades para reducir daños).

Por otro lado, la capitalina señaló que, si no se cuenta con una colaboración entre Estado y sociedad para hacer frente a la pandemia, la batalla está perdida (evidentemente, apuntando dedos en dirección opuesta al Gobierno de México). Ojo, que no se nos olvide que este camino de responsabilidad es de doble sentido y, así como debemos seguir insistiendo en que se suspendan fiestas, bodas y demás actividades no esenciales; también es importante hacer un llamado a que las autoridades prediquen con el ejemplo, y que practique todas las medidas de sanidad como, por ejemplo, el uso del cubrebocas (aquí no apuntaremos dedos).

También, a través de un video compartido en redes sociales, la mandataria señaló que está comprobado que el incremento de contagios en la ciudad se ha debido, en mayor medida, al aumento de fiestas y reuniones familiares, puesto que es dentro de estos espacios en donde las medidas de sanidad —como el uso del cubrebocas y la sana distancia— se relajan.  Esto no debe se han tomado como días feriados de covid y se ignorado las advertencias de contagio. 

En el transcurso de esta pandemia hemos visto actos masivos que se llevado a cabo con responsabilidad sanitaria, como el Pride Virtual 2020; no obstante, también hemos escuchado de grandes irresponsabilidades multitudinarias, como el festival de música Art With Me —que se realizó en Tulum del 11 al 15 de noviembre— del cual resultaron enfermas decenas de personas. Es decir, en gran medida, la razón por la cual hemos llegado al punto en el que estamos se debe a la imprudencia. Podemos cuidarnos, lo que falta es voluntad para hacerlo.

Por cierto: 

A sorpresa de muchas personas, este 12 de diciembre la Basílica de Guadalupe permaneció vacía en el marco de la celebración de la Virgen de Guadalupe, algo jamás visto en los 400 años de su existencia. Al respecto, el presidente de la República comunicó a través de su cuenta de Facebook: “No hay mejor muestra de la responsabilidad del pueblo de México ante la pandemia, que esta imagen de la Basílica vacía en el día dedicado a la Virgen de Guadalupe. No olvidemos que entre todos los símbolos, los mexicanos sitúan en primer lugar la veneración a la Virgen y en segundo el respeto a Juárez”.

Sobre esta noticia llaman la atención dos elementos. El primero, el logro que es la celebración alternativa a la Morenita, y su contraste con las reuniones millonarias de años previos. El segundo, que el presidente considere que el respeto a Juárez sea el segundo simbolismo más importante para las y los mexicanos. 

Le salió lo fanboy al presidente:

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